Opinión
El camino que nos falta para llegar a la paridad
Por Óscar Viña Pardo
La brecha salarial y desempleo son dos factores determinantes en el pleno desarrollo de la mujer en los diferentes campos de su ser como mujer, y es ese el reto que debemos trabajar en conjunto como sociedad para buscar la paridad, que no se debería lograr a través de leyes, sino desde la convicción.
Celebro el hecho que la gobernacion y alcaldía de Ibagué tengan en los despachos principles a mujeres, o que organizaciones como la Andi, Comfenalco Tolima, El Nuevo Día, RCN, Olímpica, por nombrar algunas, sean lideradas por mujeres exitosas, que por ser grandes no significa que no tengan los mismos problemas cotidianos de quien se queda en casa cuidando a un enfermo, o sigue en esa búsqueda de oportunidades.
Brecha salarial
La brecha salarial entre hombres y mujeres en Colombia es una realidad que persiste a pesar de los avances en la lucha por la igualdad de género. Según el Dane, en 2020 las mujeres ganaron en promedio un 17,3% menos que los hombres. Esta desigualdad se presenta en todas las áreas, desde la remuneración en trabajos formales hasta los ingresos en actividades informales.
En la vida cotidiana, muchas de las mujeres deben enfrentar prejuicios y estereotipos de género que las limitan y les impiden desarrollar todo su potencial. Esa en una tarea que tenemos pendiente como sociedad.
Desempleo
El desempleo es otro problema que afecta a toda la población, pero las cifras indican que las mujeres enfrentan mayores obstáculos para conseguir empleo. Según datos del Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE), en enero de 2022 la tasa de desempleo en hombres fue del 11,4%, mientras que en mujeres fue del 17,6%.
Las mujeres enfrentan múltiples barreras en el mercado laboral, como la discriminación de género, la brecha salarial y la falta de acceso a oportunidades de formación y capacitación. Además, muchas mujeres son responsables del cuidado de la familia y el hogar, lo que les dificulta conciliar su vida laboral y personal.
Aunque hoy los roles dentro del hogar han cambiado, la tendencia en materia laboral es otra tarea pendiente, y las estadísticas en empleo juvenil femenino son todavía más preocupantes.
Acceso a la educación
En cuanto acceso a la educación el país nos muestra una cara llena de esperanza, en las instituciones de educación media son más las mujeres que terminan su ciclo, aunque la gran amenaza, son los embarazos a temprana edad que cortan ese proyecto de vida de las mujeres.
Según datos del Ministerio de Educación Nacional de Colombia 2020, el porcentaje de mujeres en carreras universitarias fue del 55,6%, mientras que el porcentaje de hombres fue del 44,4%. Esto indica que hay más mujeres que hombres matriculadas en programas de educación superior en Colombia.
Aunque hay carreras como las ingenierías por ejemplo donde son más los hombres que las mujeres, poco a poco van ingresando a ese mercado laboral, sin desconocer sus demás potencialidades como son el ser mujer, hermana, hija, madre, deportista, esposa, amiga.
Acoso sexual
El gobierno nacional no tiene cifras nuevas en esta materia, las encontradas pertenecen al estudio realizado por la firma consultora Merecer en el 2018, encontró que el 34% de las mujeres encuestadas en Colombia habían sido víctimas de acoso sexual en el trabajo. Con el agravante que la mayoría de los casos de acoso no se denuncian, debido a la falta de confianza en las instituciones y a la percepción de que las víctimas pueden sufrir represalias.
Las leyes que desde el 2008 protegen a las mujeres en esta materia hacen referencia en especial a la 1257 de 2008 por medio del cual se establecen medidas para prevenir, corregir y sancionar la violencia y la discriminación contra las mujeres, incluyendo el acoso sexual. También existe el Código Sustantivo del Trabajo, que establece que el acoso sexual es una forma de discriminación laboral y está prohibido en el ámbito empresarial.
El movimiento "Me Too" (también conocido como #MeToo) ha tenido impacto a nivel mundial en la denuncia de casos de acoso y abuso sexual. En 2019, un grupo de mujeres colombianas inició el movimiento #YoTeCreo, que es una iniciativa que busca brindar apoyo a las víctimas de violencia sexual y promover la denuncia de estos casos. Sus resultados son tan efectivos que han permitido entre otros, alertar a los gobiernos nacional, regionales o locales detener nombramientos de personas como el embajador en Emiratos Arabes Unidos, Victor de Currea Lugo
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Para cuándo la paridad en Colombia
En un encuentro de industriales realizado este 7 de marzo en Cartagena, hablaron de 132 años para llegar a esa paridad. Yo no creo que tanto tiempo, quizás sea torpe. La reforma laboral que propone el gobierno debe sumarse a los esfuerzos de las empresas y la disposición individual de las personas a cambiar sus actitudes y comportamientos.
Sin embargo, hay algunos avances en el país que apuntan en la dirección de la igualdad de género en el ámbito laboral. Por ejemplo, la Ley 1257 de 2008 establece medidas para garantizar el acceso de las mujeres a un trabajo digno y en igualdad de condiciones, y la Ley 1496 de 2011 establece un porcentaje mínimo de mujeres en los cargos directivos de las empresas públicas.
Además, cada vez son más las empresas que adoptan políticas de igualdad de género y diversidad, lo que puede ayudar a fomentar un entorno laboral más inclusivo. Y, en general, se observa una mayor conciencia y preocupación por la igualdad de género en la sociedad colombiana.
Este artículo fue construido con el apoyo de la inteligencia artificial
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