Periodismo de análisis y opinión de Ibagué y el Tolima

Opinión

Señora hermana Hurtado, qué falta de empatía con las mujeres

Señora hermana Hurtado, qué falta de empatía con las mujeres

Por José Baruth Tafur G.

*Abogado. Especialista en Marketing Político. Maestrante Comunicación Política

Vamos por partes en la interpretación del discurso. Según la señora Carolina, que algunos medios la encumbran como ‘reconocida dirigente’, sí la misma que manifiesta “que la ley no la obliga a habilitar comedores comunitarios”, ahora tratando de lavar el rostro de su hermano, indica que todo esto es culpa de una “estrategia podrida”. ¿No será que lo que de verdad se pudrió fue el modelo de liderazgo autoritario, clientelista y misógino que vendieron durante años como si fuera una promesa de progreso?

Y no, señora Carolina Hurtado, hermana de quien se hurto el sueño del puente Fantasma de la 60, no fue una palabra mal interpretada. Fue una frase con carga, contexto y desprecio. Cuando Andrés Hurtado llama “tonta” a las mujeres y en específico a la que hoy ostenta el cargo más importante de la ciudad, no es un simple desliz lingüístico. Es el eco de una política machista que siempre los ha dejado hablar por encima de las mujeres ya que él es el padre de todas.

Pero ahora resulta que no podemos criticar a Andrés Hurtado por esa frase, porque él ha defendido el talento femenino como pocos. ¡Faltaba más!. Nosotros no entendimos nada, ¿cierto?. Seguramente fue un elogio en clave, un piropo oculto, una especie de “te quiero” disfrazado de “tonta”. Qué afortunadas las mujeres del Tolima por contar con un defensor tan... elocuente y con una hermana que sin importar lo que diga o haga siempre tendrá una justificación.

Y ahí no para la cosa. Cuando ya creíamos que el circo se quedaba sin show, la hermana del jefe del clan Hurtado nos suelta que la verdadera hipocresía está en quienes no se indignaron por hechos expresados anteriormente. ¡Grave error, falta de argumento y diría falta de empatía con las mujeres, qué mal asesorada! ¿desde cuándo las miserias ajenas justifican las propias? Eso es como robar el dinero de un puente de la 60 y justificarse diciendo que el vecino también lo hace. El manual del cinismo, edición 2025.

Lo más irónico de todo es que, en plena crisis, quien negó los comedores comunitarios a los niños, adultos mayores y madres cabeza de familia, pide volver a dialogar con Jaime Yepes, el mismo que los metió al baile y que ahora, por lo visto, no quiere volver a tocar esa canción. Como diría cualquier madre sensata: “el que la hace una vez, la vuelve hacer mil veces”

Este sainete político no necesita más actores. Ya tenemos a la hermana en negación, al exalcalde arrogante misógino, y a un pueblo que, entre la risa y la pena ajena, empieza a despertar.

Siguenos en WhatsApp

Artículos Relacionados