Por: Humberto Leyton

Eso de que las encuestas que miden la intención de voto en las campañas electorales “son una fotografía del momento”, tiene un juego oculto de perversa manipulación que quieren orientar hacia uno u otro candidato.

En las últimas horas se han conocido dos en Ibagué, que han levantado todo tipo de críticas y de sentimientos políticos que cada quien lo expresa desde la orilla en que se ubiquen sus preferencias partidistas. No exentas, desde luego, de ciertas sindicaciones de “dime quién paga las encuestas y te diré quién las gana”.

La del Centro Nacional de Consultoría ha sido blanco de opiniones que fijan sus disparos en la financiación publicitaria que recibe su promotor por parte de la Alcaldía de Ibagué. Y concluyen que esta medición de intención de voto quería colocar a sus candidatos Jorge Bolívar y Johana Aranda) en lugares de preferencia.

Pero la realidad es un tanto diferente. En nuestra opinión, Jorge Bolívar, candidato del partido conservador, desde hace días figura en entre los favoritos y en el primer lugar en diferentes encuestas que han financiado algunos movimientos y partidos distintos al candidato de “Ibagué Renace”. En consecuencia, los resultados del CNC no hacen otra cosa que confirmar el favoritismo de Bolívar.

Mientras que, por otra parte, está encuesta trata de situar a la señora Aranda, en el segundo lugar, a 9 puntos del líder de la medición, dando una sensación de posibilidades de victoria de la candidata del nefasto alcalde Andrés Hurtado, o al menos de estar bien posicionada para disputar la alcaldía de Ibagué. Es decir, el favor de esta encuesta se lo hacen a la candidata del continuismo.  Esta aspirante, en las mediciones que han realizados partidos diferentes al Conservador y al Centro Democrático, con firmas reconocidas por el Concejo Nacional Electoral, que hemos tenido la oportunidad de conocer, figura del cuarto puesto hacia abajo, sin mayores posibilidades de triunfo.

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Y ahora, en una enredada encuesta de la firma Guarumo, donde confunden hasta la fotografía de los candidatos y que financia la empresa Interaseo de William Vélez, en una forma por demás de descarada, a nuestro juicio, le otorgan por arte de magia una cifra de 39.8% a la candidata del alcalde Hurtado, y al primero que ha punteado en las diferentes encuestas lo baja a menos de la mitad con un 20.3%. ¿Cómo explicar tal diferencia de una encuesta a la otra en tan pocas horas de conocerse los resultados?

Esta es una vulgar forma de manipular a la opinión pública por parte de las firmas encuestadoras.

La firma Guarumo, es de conocimiento público, obedece a los intereses del Centro Democrático, partido principal que avala a Johana Aranda, a quien prácticamente le entrega la credencial de alcaldesa, según las cifras que exhibe en su encuesta.

Sobre esta simpática encuesta de Guarumo, nos podríamos preguntar ¿Será que Interaseo, firma que financia la encuesta le está cobrando las críticas que le ha formulado Jorge Bolívar, por lo elevado de las tarifas del aseo en Ibagué?

¿Desde cuándo Interaseo muestra interés por asuntos políticos, posicionando candidatas donde tiene intereses propios como el contrato del aseo con el municipio? ¿A qué aspira Interaseo, y su gerente William Vélez, también confeso uribista patrocinando ese tipo de encuestas?

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Sería bueno saber las respuestas a estas preguntas, como también los intereses que persiguen el grupo del señor Vélez, una ciudad donde no se presta un buen servicio de aseo, donde la ciudad permanece sucia y con las tarifas más elevadas del país.

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No obstante, la abismal diferencia de las dos encuestas entre Bolívar y Aranda, en lo que si concuerdan ambas es en bajar de cualquier posibilidad a los candidatos alternativos Marco Hincapié y Renzo García, al cerrarles cualquier posibilidad de triunfo, incluso de una remota unión entre ellos, al ponerlos en la mitad de la tabla con un empate del 5%  en la del CNC y el 4%  en la de Guarumo, cifras que no les permite tomar ninguna alternativa; obviamente si aceptaran estos resultados.

Las encuestas, especialmente aquellas políticas, son no solo para analizarlas con pinzas, sino para poner en duda sus resultados, sobre todo si son empresas que en estos de encuestas han sido tan cuestionadas como Guarumo.