Historias

“A Ibagué la debemos salvar de la corrupción”: Ricardo Ferro

“A Ibagué la debemos salvar de la corrupción”: Ricardo Ferro

Ricardo Ferro, nacido en Ibagué, tiene 49 años de edad.

Por Alejandro Hernández


En el año 2011 Ricardo Ferro tuvo su primer intento de llegar a la Alcaldía de Ibagué. Obtuvo la segunda votación más alta, solo por detrás de Luis H. Rodríguez, quien resultó elegido alcalde. Luego, Ferro lo volvió a intentar en el 2015. También fue el segundo más votado, por detrás del exalcalde Guillermo Alfonso Jaramillo.

Tras esos dos fracasos, en el 2018 se lanzó a la Cámara de Representantes, y ganó una de las seis curules por el departamento del Tolima. Fue congresista del partido Centro Democrático hasta el 2022, cuando intentó dar el salto al Senado de la República, y fracasó de nuevo.

Ante esa derrota electoral, que entre otras cosas le dolió porque no la esperaba, Ferro anunció su candidatura, por tercera vez, a la Alcaldía de Ibagué, en las elecciones de octubre de este 2023. Pero lo sorprendente es que tomó distancia del Centro Democrático y ha optado por una candidatura independiente.

Ha anunciado que su movimiento se llamará Salvemos a Ibagué. Con un comité cívico espera reunir las firmas necesarias para ser candidato independiente. Confía en que la tercera será la vencida.

En diálogo con El Cronista.co explicó los motivos para no ser el candidato del Centro Democrático. Además, explicó los ejes centrales de su propuesta de gobierno. Finalmente, criticó duramente la gestión del alcalde Andrés Hurtado, a quien en algún momento pareció darle un espaldarazo.

El Cronista.co: ¿De qué espera usted salvar a Ibagué?

Ricardo Ferro: Salvemos a Ibagué es un movimiento ciudadano que, como su nombre lo indica, espera salvar a la ciudad; pero no va a salvar a Ibagué una sola persona, necesitamos que todos nos apersonemos de este movimiento ciudadano.

“Necesitamos salvar a Ibagué del desempleo, de la inseguridad y de la corrupción”

EC: Pero en temas, ¿cuáles serían esas propuestas concretas?

RF: Necesitamos salvar a Ibagué del desempleo, de la inseguridad y de la corrupción. Esos son los tres temas que más están aquejando en estos momentos a la ciudad de Ibagué. Somos la segunda ciudad con más desempleo, además tenemos un problema de inseguridad muy grande y uno de cada dos ibaguereños siente que la ciudad en el último año está más corrupta.

EC: ¿Por qué confía en que la tercera será la vencida, qué será diferente en esta oportunidad?

RF: Vamos a hacer una campaña más personalizada. Yo he perdido elecciones, pero no he perdido ni mis principios ni mis valores. Obviamente cometimos errores en las campañas, por eso en esta oportunidad queremos tener mucha más cercanía con la gente. Queremos que la gente sienta un Ricardo Ferro mucho más cercano, que el elector pueda dialogar directamente conmigo. Vamos a construir un programa de gobierno con la gente. En la medida que recojamos las firmas, vamos a escuchar propuestas para el programa de gobierno.

“Yo quiero que los jefes de este proyecto político sean los mismos ciudadanos; que el alcalde rinda cuentas a los ibaguereños y no a un cacique político”.

EC: ¿Por qué no buscó el aval del Centro Democrático?

RF: Hay que entender que las dinámicas son diferentes para ser congresista que para ser alcalde de una ciudad. Yo quiero que los jefes de este proyecto político sean los mismos ciudadanos; que el alcalde les rinda cuentas a los ibaguereños y no a un cacique político. Por eso este proyecto nace como un movimiento ciudadano.

“Los intereses de Ibagué deben estar por encima de los intereses de los partidos”

EC: ¿Pero por qué el repentino distanciamiento con el Centro Democrático?

RF: No hay distanciamiento. El hecho que yo quiera hacer un proyecto político independiente, no quiere decir que salga peleando con el Centro Democrático. Tengo la mejor relación con el presidente Uribe, con quienes fueron mis compañeros de partido. Lo que pienso es que los intereses de Ibagué deben estar por encima de los intereses de los partidos. Bienvenidos los partidos que nos quieran apoyar, pero con un objetivo claro: salvar a Ibagué.

EC: A propósito, ¿Con quiénes piensa buscar alianzas?

RF: Deben ser personas que sean capaces de sostener en público lo que hablen en privado. Aquí no estamos haciendo alianzas politiqueras, lo que queremos es darle a Ibagué lo que necesita. Y lo que necesitamos, por ejemplo, son 20.000 empleos nuevos. Es una meta ambiciosa, pero que podemos lograr con un sector privado fortalecido y un sector público comprometido.

“El Alcalde Hurtado va a arrancar unas obras, sin presupuesto, con vigencias futuras, dejando a la ciudad empeñada”

EC: ¿Por qué en Ibagué seguimos hablando de los mismos proyectos de hace 20 o 30 años, como el Acueducto Complementario?

RF: A veces convierten en discurso político las necesidades de los ibaguereños. Que en su cuarto año de gobierno el alcalde (Andrés Hurtado) hable de apenas arrancar obras como las del intercambiador de la calle 60, sencillamente lo que quieren dejarle a la ciudad son unos elefantes blancos. Van a arrancar unas obras, sin presupuesto, con vigencias futuras, dejando a la ciudad empeñada, como si no fuera suficiente con todos los créditos que han adquirido. Esa manera de gobernar es la que impide que la ciudad avance.

EC: ¿Qué preocupaciones le han expresado los ibaguereños con los que ha dialogado en este inicio de campaña?

RF: La gente siente un alcalde desconectado de la ciudad, que a veces está de vacaciones, que lo suspendió la Procuraduría por estar haciendo política, que un día se inunda un barrio, pero el alcalde está en una cumbre política en Argentina. Esa desconexión de quien gobierna con la ciudad, está llevando a que los ibaguereños se decepcionen constantemente. Cuando uno ve un alcalde desconectado, que mantiene más preocupado por hacer política que por gobernar, con anuncios y más anuncios, pues no se ve cómo resolver los problemas de la ciudad.

“El actual Alcalde tiene su candidata propia, y la mejor revocatoria es no elegirle esa candidata”

EC: Usted desde el principio criticó la gestión del alcalde Andrés Hurtado, sin embargo, en algún momento pareció darle un espaldarazo al pedir tiempo para él. ¿Por qué ese cambió de opinión?

RF: La opinión siempre ha sido la misma. Recordemos lo de los mercados, que por más que haya sido exonerado por los entes de control, eso tenía un tufillo a corrupción. Aquí tuvo que venir un ministro de Estado para parar la licitación del Coliseo Mayor porque era una licitación chaleco, arreglada. Después vino una revocatoria de mandato, y lo que dije es que la mejor revocatoria se da en las elecciones del próximo alcalde. El alcalde tiene su candidata propia, y la mejor revocatoria ahora es no elegirla. Esas revocatorias a mitad de periodo lo que hacen es fortalecer los mandatarios. Eso fue lo que dije en su momento.

EC: ¿Ahora, si hay elementos suficientes para juzgar como mala la gestión de Hurtado?

RF: Yo lo que expreso no es lo que siento, sino lo que me manifiesta la gente en la calle. Me dicen que Ibagué es un desastre, que hay mucha corrupción, que hay mucha inseguridad, y no pasa nada. ¿Entonces nos quedamos de manos cruzadas? No, cuando uno se mete a la política es para ser vocero de la gente, y por ello expreso todo esto de manera clara.

EC: ¿Qué análisis hace de la campaña electoral que se viene?

RF: Hay unos esperando el ‘dedazo’ de los caciques políticos, otros buscando alianzas con los que antes les parecían malos, lo que evidencia cómo se desdibuja la política. Yo he perdido elecciones, pero ninguno de los que me ganaron pueden decir que Ferro fue a pedirles un puesto o un contrato.

“No soy de los que se la pasa diciendo, qué hice, pero he trabajado por Ibagué, por el Tolima y por Colombia”.

EC: Seguramente será una campaña caldeada, marcada por ataques y críticas…

RF: Lo que no me podrán decir es que no cuento con la formación académica necesaria. He sido reconocido como un urbanista serio en el Tolima. Tampoco pueden decir que no hice nada como congresista. Hice la ley más importante de los últimos cuatro años en Colombia, que fue la que permitió que todos los colombianos nos vacunáramos contra el covid. Que hay gente no lo reconozca, allá ellos. Le ayudamos a Ibagué con la ley de honores Juan Mario Laserna, que fue la que permitió terminar el Panóptico. No soy de los que se la pasa diciendo qué hice, pero he trabajado por Ibagué, por el Tolima y por Colombia.

“Necesitamos recuperar los principios y valores para hacer política en Ibagué”

EC: ¿Cómo cree que piensa el común de la gente de Usted?

RF: Puede que mucha gente no me quiera, que tenga defectos como todos, pero puedo mirar a la cara a los ibaguereños y decirles que soy una persona coherente, que me muero en mi ley. Eso es lo que necesitamos en esta campaña: recuperar los principios y valores. Pueden decirme muchas cosas, pero nunca que me he robado un peso.

EC: Su mensaje para los ibaguereños de cara a esta campaña que se viene…

RF: Dignidad, hay que tener dignidad. La dignidad se la da uno mismo. Uno tiene que dignificar su propio voto. Si queremos una mejor ciudad, una Ibagué más próspera, no vendamos el voto. Eso no significa que voten por mí, voten por el que quieran, pero no se dejen comprar el voto. Siempre existirá quien quiera comprar votos, pero el problema es que existan quienes lo quieran vender.

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