Este lunes 11 de diciembre a las 5:00 p.m. en el Panóptico de Ibagué, la veeduría del Patrimonio Ambiental y Cultural de Ibagué, realiza su asamblea anual en la que define el derrotero a cumplir en el año que está próximo a iniciar.

“La defensa del patrimonio cultural y ambiental de Ibagué es una tarea que no da espera y en la que esperamos que las mayorías de ibaguereños se sumen a esta causa, que es la causa de todos. El daño indiscriminado que se comete con la naturaleza en la ciudad debe parar”, dice el ambientalista, gestor cultura y docente, Víctor Sánchez.

Dentro de los objetivos trazados por la veeduría del Patrimonio Ambiental y Cultural de Ibagué que se ha propuesto para el 2024 y que deben quedar refrendados en la asamblea de este lunes 11 de diciembre, está la protección del corredor ambiental de Ibagué a fin de preservar las aves y fauna  silvestre de fauna, hoy en permanente amenaza.

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En ese orden de ideas, los objetivos los tienen bien definidos:

• Frenar la tala de árboles por proyectos inmobiliarios y de infraestructura urbana en el territorio

• Frenar la deforestación de los cerros del norte que amenaza con desbordar las quebradas

• Frenar el abandono de la granja San Jorge, sede del Conservatorio de Ibagué Amina Melendro de Pulecio. Bien de interés cultural de carácter nacional.

Otro hecho importante que se evaluará en la asamblea, aparte de elegir una nueva directiva  de la veeduría del Patrimonio Cultural y Ambiental de Ibagué, tiene que ver con la consolidación de herramientas que permitan dignificar la labor de los artistas de la Casa de la Cultura del Sur y respeto por los escenarios culturales.