Por Flor Elisa Murcia Zapata  - Neuropsicóloga clínica.  -Directora Fundación Rescatando Vidas

Muchas personas aún les atemoriza escuchar la palabra Salud Mental porque piensan que está relacionado con “estar loco”…es más, cuando por alguna razón les dicen que necesitan ir al psicólogo o al psiquiatra la respuesta más común es… “si yo no estoy loco.”.

Estos conceptos han sido malinterpretados en muchos contextos y de ahí la resistencia a buscar una ayuda a tiempo… o también hay quienes minimizan o ignoran  la afectación de la salud mental de un hijo(a), algún familiar, amigo o conocido porque lo síntomas no son tan evidentes como en una enfermedad física.

Preocupante panorama si seguimos con esas creencias distorsionadas, Según datos del Ministerio de Salud revelados en 2024, el 44,7% de los niños y niñas en el país muestran indicios de problemas de salud mental, afectando a jóvenes entre los 17 y 24 años, adolescentes de 12 a 16 años y niños de 6 a 11 años.

Por esta razón es importante que prioricemos la salud mental, hay que educarnos al respecto y multiplicar una verdadera información: La OMS define la salud mental como «un estado de bienestar en el cual cada individuo desarrolla su potencial, puede afrontar las tensiones de la vida, puede trabajar de forma productiva y fructífera, y puede aportar algo a su comunidad»

Y entonces bajo este concepto, a quién no le gustaría tener salud mental <sentirse bien>, sin embargo, hacemos todo lo contrario: mala higiene de sueño, malos hábitos alimenticios, no hacemos ejercicio físico, trabajar sin establecer límites de tiempo, se llega tan cansado a la casa que ya no hay disposición para compartir en pareja ni para aquellos bellos momentos de compartir en familia …los niños y jóvenes cada vez mas metidos en su mundo de pantallas. Sin quererse relacionarse con el mundo y en donde todo les parece aburrido  ...personas deprimidas que no sueltan el pasado…y los ansiosos que se anticipan el futuro catastrófico, y los incoherentes del presente que se amargan más con lo que falta y no agradecen lo que tienen…y qué decir de los que sufren cuando se maltratan con su permanente auto diálogo negativo  “soy un inútil ..no sirvo para nada ...” son duros consigo mismo, sin compasión,  acabando con su amor propio y generando en  los demás sentimientos  de minusvalía  y de pesar … quejándose de no ser aceptados.. cuando ni quisiera se aceptan a sí mismos.

En fin, nos toca perder el miedo...cambiar el chip y buscar ayuda oportuna para no perder la salud mental…nos queda seguir luchando por nuestro bienestar, tejer entrelazados salud mental y tener claro que nadie más puede cuidar de tu salud mental sino tú mismo, no depende de los demás ni del mundo,  pues no tienes el control de lo que ocurre afuera …pero si tienes el control de lo que pasa en tu mente.