El momento preciso para el voto en blanco en Ibagué, es este, es hoy.
 

El desconcierto y la desconfianza que se palpa frente al actual proceso de elección de alcalde de la ciudad, es evidente.
 

No es aventurado afirmar que la franja de ibaguereños que se encuentra en un desencanto notorio, es amplia, y ese desencanto se profundizó con los acontecimientos vergonzosos que rodearon la renuncia del candidato José Barreto, quien aún no ha podido explicar con argumentos convincentes, qué lo llevó a tomar tal decisión.

Lo invitamos a leer: El liberalismo debe redireccionar su rumbo

Por el contrario, esa falta de claridad ha conducido a que se tejan, a la luz de cómo se presentaron los hechos, historias, conjeturas y comentarios que podrían, resultar ciertos.
 

Es real, hubo engaño, hubo una flagrante mentira, todo indica que fue un hecho premeditado y urdido con un fin específico.
 

Ante esa zozobra, ante ese ‘no saber qué camino coger’, no queda otra salida que el voto en blanco. Pero para que esta figura alcance el éxito en esta coyuntura, tendría que ser liderada por los candidatos que el pasado viernes se presentaron juntos para denunciar falta de garantías electorales.
 

Como en ese grupo no se avizora una posibilidad de unión en torno a un solo candidato, una salida, esa sí de grandeza por Ibagué, sería que renunciaran a la aspiración y se volvieran promotores de primera línea del voto en blanco.
 

Es claro, de acuerdo al panorama actual, que ninguno de los 4 va a ganar. Con la apatía y el desánimo existente, podrían exponerse a que la votación que tienen pensada sacar, disminuya.
 

En cambio, optar por el voto en blanco, estarían contribuyendo a frenar que la ciudad caiga en manos de la más rampante politiquería y populismo.
 

Con ello estarían enviando una señal de esperanza al país. El llamado también se hace extensivo a Hugo E. Zárrate y Diana Gaitán.
 

•          Ex jefe de redacción de Tolima 7 días

•          Autor del libro ‘Las claves de los buenos alcaldes’