Crónicas

Que Cortolima se apiade de 'Benita'

Que Cortolima se apiade de 'Benita'

Que Cortolima se apiade de 'Benita'

Benita por mucho tiempo se llamó Benito, porque su dueño, el reportero gráfico Ricardo Espinosa creía que era loro hasta que una vecina le aclaró  que se trataba de una lora.

Por cuenta de un caso de insensatez y falta de sentido común de parte de algún funcionario de Cortolima, Benita debe estar en este momento padeciendo sufrimientos, los que nunca enfrentó en los nueve años que permaneció al lado de los cuidados especiales de Ricardo y su familia.

Durante un viaje de pesca en el 2011 a la represa de Prado, Ricardo adoptó a Benita recién nacida, después que mamá lora murió. Se la trajo para su casa en Ibagué en una caja de cartón y pensó que no aguantaría el viaje. Sin plumas y pocas señales de vida, las posibilidades que Benita tenía de vivir eran escasas.

Benita, que aún no se le había puesto nombre  llegó con vida y fue acogida por la familia con todo el cariño, la alegría y los cuidados. Con Benita se empezó un proceso de cuidado especial. Lo cierto es que fueron apareciendo las plumas, Benita fue creciendo hasta convertirse en la mascota preferida. Se le acondicionó una jaula solo para dormir y protegerla. Se hizo la mejor amiga de 'nico', un rottweiler serio pero con Benita tuvo los comportamientos más cómplices. Se volvieron inseparables, durante el día Benita estaba libre por toda la casa. A la hora del almuerzo compartía un espacio en el comedor con toda la familia.

Durante nueve años vivió feliz y muy agradecida con Ricardo que la salvó.
Esa felicidad tanto para Benita como para toda la familia y Ricardo se acabó hace 20 días, cuando dos agentes de la policía ambiental llegaron hasta la casa de Ricardo y se llevaron a Benita para entregarla a Cortolima. El argumento es que por ley está prohibido tener animales salvajes en cautiverio. Ricardo demuestra con rabia e impotencia que Benita no era un animal salvaje, es más "nunca lo fue".
Todo este tiempo, 20 días, se la ha pasado en Cortolima, de oficina en oficina, presentando cartas y derechos de petición para que le devuelvan a Benita, Ricardo pide que se la den en adopción. Lo único que ha encontrado son funcionarios indolentes, uno que otro razonable, que no resuelven nada.

Benita, que a Ricardo le decía 'pa' y le decía 'rico' cuando le daba la comida, debe estar rogando que a alguien en Cortolima, en un acto de sensatez, tome la pronta decisión de devolverla a la casa de la familia Espinosa de donde nunca debió salir, porque allí era tratada como una reina, la reina Benita.
 

Artículos Relacionados

Noticias Recientes