Por estos días se encuentra en Ibagué el director del partido Nuevo Liberalismo, Juan Manuel Galán, para ajustar detalles de cara a las elecciones regionales de octubre.

El Nuevo Liberalismo fue fundado por su padre, Luis Carlos Galán, a finales de la década de los 70. Luego, en los años 80 y 90, el partido tomó fuerza y recibió a los inconformes con el liberalismo tradicional. Sin embargo, sus militantes fueron víctimas de un sangriento exterminio a manos del narcotráfico y agentes del Estado.

Sin duda alguna, el episodio que más marcó al partido fue el magnicidio de Galán en 1989. Fue el principio del fin para el Nuevo Liberalismo, que luego de 2 décadas recuperó su personería jurídica en el 2021.

En diálogo con El Cronista.co, Juan Manuel Galán explicó cómo el partido busca renacer. Para esto, tienen previsto impulsar los comités territoriales, como el del Tolima, donde aspiran tener candidatos a concejos, alcaldías y Asamblea.

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A su vez, Galán no pudo evitar referirse a la figura del exsenador y exministro, Alberto Santofimio Botero, condenado como determinador del magnicidio de su padre, quien ya goza de libertad en Ibagué y hasta participa en escenarios políticos.

El Cronista.co: ¿Cuáles son los propósitos del Nuevo Liberalismo en Ibagué y el Tolima en las próximas elecciones?

Juan Manuel Galán: El principal propósito que nos anima es la reconstrucción de un partido, no solo en el Tolima e Ibagué, sino en todo el país. El 29 de octubre queremos que el Nuevo Liberalismo vuelva a contar con una base de participación política territorial, vinculando jóvenes, mujeres, líderes sociales y ambientales, pensionados, a la clase media, todos sectores sociales que hoy en día no tienen representación política.

EC: ¿Cómo piensan otorgar los avales?

JMG: Con lo que denominamos la ruta del aval, que tiene 5 pasos fundamentales. El primero es que nuestros candidatos deben pasar por el Sistema de Prevención y Detección del Lavado de Activos y del Financiamiento del Terrorismo (SPDLAFT). Segundo, deben reflejar en sus propuestas de campaña que están comprometidos con el ideario del partido. Tercero, deben comprometerse a apoyar nuestras listas a concejos y asambleas.

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Cuarto, deben tener claro que no se pueden aliar con los clanes regionales, como el del Tolima, que es el clan Barreto. Y quinto, deben pasar por una capacitación para conocer la historia del Nuevo Liberalismo.

EC: ¿Para la conformación de esas listas piensan en alianzas?

JMG: Eso depende la región, cada una es un universo único. Lo ideal es tener listas propias, independientes, pero no descartamos armar coaliciones con fuerzas políticas afines, porque hay que unir esfuerzos y capacidades, por encima de las diferencias políticas. Lo más importante debe ser el trabajo para recuperar una ciudad como Ibagué, que ha estado mal gobernada. En regiones como el Tolima consideramos alianzas.

EC: ¿A propósito, Guillermo Pérez será el candidato del Nuevo Liberalismo a la Alcaldía de Ibagué?

JMG: Guillermo es un líder histórico, fundador del Nuevo Liberalismo. Es una persona muy importante, reconocido por su labor intelectual y política. Sé que será un candidato muy respetuoso de la institucionalidad del partido y del comité territorial. Creo que no va a tener problemas para pasar por la ruta del aval.

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EC: De ser así, el Nuevo Liberalismo llegaría a la coalición del Frente Amplio con el Pacto Histórico y hasta el Partido Liberal. ¿Está de acuerdo?

JMG: Debemos ponernos por encima de las diferencias políticas si realmente todos nos ponemos a trabajar por rescatar a Ibagué y el Tolima. Nosotros hemos recibido petristas y uribistas arrepentidos; trabajamos sin ideologías, sin dogmatismos, sin soberbia. Nuestro interés es unir, construir, enfocarnos en las soluciones que necesitan los ciudadanos.

EC: ¿Qué esperan que sea diferente en estas elecciones, contrario a las del 2022 cuando no les fue tan bien como esperaban?

JMG: Nos tocó un escenario político muy difícil, pero logramos sacar medio millón de votos a la Cámara de Representantes, donde obtuvimos 2 curules; obtuvimos 370.000 votos al Senado. Así que, si se tienen en cuenta las condiciones adversas, los resultados fueron muy positivas.

EC: ¿Cuáles fueron esas condiciones adversas?

JMG: El Nuevo Liberalismo fue víctima de un exterminio, está renaciendo y el Consejo Nacional Electoral apenas le otorgó un presupuesto de $260 millones para funcionar todo el año, mientras que, el partido Comunes de las Farc tiene $8.000 millones. Las condiciones, las garantías, el equilibrio para competir fueron muy adversas; pero en 40 años de historia hemos estado acostumbrados a eso, a enfrentar la adversidad.

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EC: ¿Qué representa para usted que todavía Alberto Santofimio Botero sea una figura con repercusión en la política del Tolima?

JMG: Más grave que la impunidad judicial, termina siendo la impunidad social. Lo grave no es tanto que Santofimio trate de hacer lo que hace; lo grave es que muchos tolimenses le rindan pleitesía, como si nada hubiera pasado. Eso refleja la crisis económica y política que afronta el Tolima. Por eso es tan importante que las nuevas generaciones se metan en política, para superar liderazgos de ese tipo.

EC: ¿Le molestó cuando apareció con la candidata del Partido Conservador, Adriana Magali Matiz?

JMG: No me sorprendió mucho, porque eso refleja claramente lo que es el clan Barreto. A un buen entendedor pocas palabras.

Por Alejandro Hernández