Periodismo de análisis y opinión de Ibagué y el Tolima

Destacadas

Ibagué, entre el relleno, La Miel y las morcillas de basura

Ibagué, entre el relleno, La Miel y las morcillas de basura

Por Víctor Sánchez - Gestor cultural


Asistí a la Audiencia Pública sobre el Relleno Sanitario, el miércoles 4 de septiembre pasado, cuando al fin de varios intentos, la directora de la  Corporación Autónoma Regional del Tolima, Cortolima logró con  voz firme y  rigor, poner orden  y vencer la altanería de la comunidad de la Hacienda la Miel que se niega  a seguir de vecina de  una formación montañosa, donde cada mes llegan  500 toneladas de basura, desde hace  veinte años.

En la puerta del gran coliseo ´La Gloria de Dios’, estaba  doña Leo, una desplazada de la Hacienda Bellacruz en el departamento del Cesar, de donde salieron expulsados de  una propiedad del exMinistro y exembajador Carlos Arturo Marulanda; nos contó que desde hace varios días dejó el oficio de hacer y vender rellena y fritanga, pues la falta de agua, el calor, el mal olor, la chulamenta  y las moscas,  acabaron  con el negocio, ya tiene ronchas por todo el cuerpo y  perdió la clientela de este pueblo costeño localizado en el corregimiento de Buenos Aires  en Ibagué, a donde llegaron por orden del Gobierno Nacional , que les otorgó en esa época un predio, con una sola condición: ceder un pedazo de su nueva  tierra para la construcción del Relleno Sanitario.

Nos saludamos con varios líderes comunales, entre ellos con una veterana   veedora de control del Ibal, que no sabe qué va a pasar con la escasez de agua, ya que se cansó de asistir a reuniones donde hablan y hablan sin resolver nada. “De vez en cuando me llevan las actas a la casa para que firme, ya que desde que a mi yerno le dieron el contrato de la camioneta no me queda tiempo de ir” nos dijo, y puede tener razón, eso de ser veedor ciudadano no sirve para nada, comentaron los contertulios; si habla, mal, si no habla, peor, fíjese lo que le pasó al finado  Félix Martínez; entonces uno cumple con asistir a estas reuniones, foros o audiencias; saludamos, escuchamos, comemos y nos vamos.

La primera tanda de intervenciones de la audiencia estuvo por cuenta de las directivas de Interaseo, una larga fila de funcionarios de  esa entidad,  que constituyó el empresario antioqueño William Vélez, para dar solución a la problemática de los residuos sólidos en Ibagué;  un equipo de reinas y varones que en sus cortas y bien leídas ponencias, nos dieron cátedra de  todo lo sabido y por saber de cómo  separar las basuras en nuestras casas, de la importancia de los rellenos sanitarios y de las tarifas de aseo que aumentarán si Cortolima no les amplía la licencia ambiental por cuarenta años más; todo un equipo joven de profesionales a quienes se les notaban por encima de los  uniformes todas  las maestrías, conocimientos y destrezas que todavía no han podido aplicar para montar la planta de procesamiento de residuos sólidos, prometida en el contrato inicial de hace dos décadas.

La delegación de la comunidad no se quedó atrás, varias mujeres argumentaron y denunciaron  los daños  por contaminación, los riesgos para la salud pública no solo para los habitantes de La Miel, sino para las demás personas.

Hablaron de la contaminación de las quebradas Guacarí, Los Adobes y la quebrada Gualanday, que en tiempos idos, era un bello balneario de tierra caliente; de la tala de más de 9 mil árboles, si se amplía  la licencia, que afectaría el  ecosistema  natural de fauna y flora,  y algo de no creer, que estos líquidos que salen de la basura acumulada pueden estar  contaminando  el Acuífero de Ibagué  un sistema de aguas  subterráneas  considerado el cuarto más importante del  país.

Entre líderes sociales y políticos asistentes, se  escuchó un llamado  de justicia ambiental, de aplicar la Ley 99 de 1993  y  demás normas y sentencias  donde mandan  que la Autoridad Nacional de Licencias Ambientales ANLA,  puede asumir  la competencia preferente para conocer el proceso de licenciamiento, verificar y controlar el cumplimiento de la licencia ambiental, de este relleno de basuras a cielo abierto que recibe además de las basuras de Ibagué, las de 14 municipios del Tolima.

Que a decir de  los representantes de la comunidad,  el proyecto del Relleno Sanitario La Miel ejecutado por Interaseo no cumple con eficiencia y eficacia, el mediocre plan de manejo ambiental tiene una cantidad de sancionatorios  que la autoridad ambiental, Cortolima no hace cumplir, no aplica el Plan de Gestión Integral de Residuos Sólidos , no hay seguimiento a los términos, obligaciones y condiciones y cuando la comunidad ha solicitado información al respecto se la niegan o la entregan incompleta, es decir no existe la posibilidad de hacer una veeduría pública a un problema de alto riesgo, sin tener en cuenta el “Principio de Precaución” que ha presentado contingencias extremas como el  incendio del año anterior y que está a unos pocos kilómetros de distancia de una clínica especializada y del aeropuerto de  Perales.

No escuché  un pronunciamiento oficial de la Alcaldía de Ibagué, a pesar de que  Ibagué Limpia, la empresa de economía mixta creada en el año 2008  para ejercer  la supervisión y control  del operador del servicio domiciliario de aseo,  constituida  con  recursos   públicos  de seis entidades oficiales, entre ellas el Municipio de Ibagué, que aportan el 45% del capital de  esta sociedad anónima en la cual es socio estratégico Interaseo con el 55% restante, que le da la posibilidad de controlar la entidad.

Con mucha astucia empresarial se convierte en un yo con yo,  como dijo un Concejal de Ibagué en un reciente debate, “es como poner al hijo a cuidar los intereses del papá ”. Toda una operación de auto control, comentó un coachíng  que se paseaba por el recinto, de acuerdo con el convenio de cooperación empresarial Ibagué Limpia supervisa la recolección, barrido, limpieza, transporte y disposición final, menos la  operación del Relleno Sanitario.

¿Así, quien no se llena? dijo doña Leo, “quiero conocer a don William a ver si me ayuda con su experiencia para volver a montar mi propio negocio de rellenas”. “El hombre le ayuda “respondió  la veedora, “él es muy servicial, lo conocí hace tiempos cuando  en persona disfrazado de Papá Noel  entregó  regalos  a los  más de 800 operarios de Interaseo ” y me contaron que  así lo hace en  diciembre en todas las empresas de aseo que maneja en Colombia, Panamá, Ecuador , Perú y Chile.

Doña Leo  está intrigada, quiere  recuperar su salud para  volver a embutir arroz, alverjas, sangre de cerdo y guiso picoso, piensa crear una empresa de este producto típico de nuestra gastronomía, con chorizos y chunchulla para exportar como lo hace don William el “Chef de las basuras”, un  innovador  que ha logrado  montar Negocios Verdes en varias ciudades  de Colombia y Latinoamérica  para dar  solución   a la gran crisis  que  sufre la humanidad, que no sabe qué hacer con el superávit de basuras en el mundo.

Es probable que don William venga al próximo seminario de Andesco sobre Gestión de Residuos Sólidos y Rellenos Sanitarios, a compartir su exitosa receta: Un guiso  grasoso tamaño familiar para los Alcaldes, deliciosa chanfaina  con entrega a domicilio en cada directorio político, picada de fritanga para los organismos de control e inspectoría,  un plan de medios con publicidad graciosa  y para quienes   no toleran las morcillas, se les prepara una dieta vegetariana. Y en la próxima audiencia pública, como dijera Orson  Welles “No preguntes qué puedes hacer por tu país. Pregunta qué hay de comer ”.

Siguenos en WhatsApp

Artículos Relacionados