Aun con la espada de Damocles pendiendo sobre la cabeza de la implementación de los acuerdos de paz, como lo dijera Jesús Santrich, refiriéndose al polémico fallo de la Corte Constitucional que hace más engorroso y dispendioso el desarrollo del proceso, las Farc en el Tolima, celebraron con entusiasmo los 53 años de existencia de esa organización guerrillera.

Tal y como se tenía previsto, este sábado 23 de mayo, los eventos realizados en los campamentos de las veredas El Oso, en Planadas (sur) y La Fila en Icononzo (oriente) del Tolima, estuvieron matizados por muestras folclóricas, recitales de poesía, danzas, entonación de canciones revolucionarias y sociales, como también por discursos alusivos fundamentalmente al proceso de implementación de los acuerdos de La Habana, donde el común denominador fue la manifestación de incertidumbre que existe en la guerrillerada con motivo del reciente fallo emitido por la Corte Constitucional que rompe la médula dorsal de los acuerdos y permite la inclusión, sustitución y renegociación de los puntos ya pactados y firmados por el gobierno nacional y las Farc.

Según las intervenciones de los comandantes guerrilleros, encabezados por Andrés Lozada, del Secretariado de las Farc,  en las dos zonas de vererdales de concentración del Tolima, la decisión de la Corte viola los acuerdos internacionales sobre negociación de conflictos armados, además de querer acabar en la práctica con la pactado en seis años de negociaciones entre el gobierno y esa guerrilla. "Este el riego más grave y grande que atraviesa el proceso de paz, al que se le quiere volver trizas tal y como lo propone la ultraderecha", señaló uno de los que llevaron la vocería.  

Otro indicó:"El Estado es uno solo, y no se puede dividir en Ejecutivo, Legislativo y Judicial, en este caso. Nosotros negociamos con el Jefe de Estado, que tiene la representación constitucional y legal de la nación y, por ende de de todos ellos, ahora no nos pueden a venir con el cuento que hasta el inspector de policía le puede meter la mano a lo ya pactado y acordado que tiene rango de tratado nacional e internacional. Esto no es una querella de policía ni un proceso ordinario", dijo líder rebelde.

Y en este mismo sentido se manifiestan todos los insurgentes, quienes no ocultan sus preocupaciones por las consecuencias que pueda traer el torpedo lanzado desde la Corte Constitucional contra los acuerdos de paz de La Habana o del Teatro Colón de Bogotá. La incertidumbre en la regla general en los dos campamentos que hay en el departamento y en todos los del país. La paz se encuentra en un limbo.

Sin embargo, existe la convicción de que el proceso es irreversible y que se encontrarán las salidas más acertadas y convenientes para salir de esta encrucijada para salir de la crisis que produjo un fallo que algunos críticos consideran más político que jurídico.

La guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (Farc), no nacieron gratuitamente en el Tolima, tuvieron sus causas profundas en la desigualdad social, la violencia, la exclusión y el atraso del campo en todos sus órdenes. (Puede leer: Un conflicto que se puedo evitar)