Por; Humberto Leyton

Todo parece indicar que los nombramientos, los puestos y los contratos, dividen al partido Liberal del Tolima.

Algunos liberales inconformes con la forma de la distribución de las cuotas burocráticas por parte de la Representante a la Cámara, Olga Beatriz González en el gobierno del Cambio del presidente Petro, han causado malestar en las toldas rojas tolimenses al sentirse marginados, y posiblemente, frustrados en sus aspiraciones que tenían.

El párrafo anterior, podría ser el cenit de las causas del cisma del partido Liberal, una organización que perdió su filosofía programática y de idearios de otros tiempos, por los puestos y los contratos. Ya no queda nada de aquel partido que luchaba por las trasformaciones y conquistas sociales a favor de las clases menos favorecidas y vulnerables. Este es un recuerdo que desapareció en la historia, para darle paso a una colectividad que, en su dirigencia, se ocupa más de las prebendas y defensa de los poderosos, que por los intereses de las clases populares.

Desde este punto de vista, podremos entender entonces, lo que está sucediendo en las filas liberales del Tolima. Aquí no hay nada de fondo ni programático ni mucho menos ideológico, son las minucias de la politiquería lo que los divide.

Pero es bueno reconocer que el clientelismo no es propio de este partido, es propiedad de todos los partidos y movimientos, desde la extrema derecha hasta la izquierda: Conservadores, Verdes, Centro Democrático, Pacto Histórico y todas sus vertientes. Pese a que tienen algunos rasgos de diferenciación, cuando se trata de puestos o contratos desaparecen las discrepancias.

Esta actitud es propia de los movimientos electoreros que solamente se acuerdan del pueblo o de las bases cuando están en campañas electorales, para la oferta de promesas de obras y proyectos, compromisos de empleos, en fin, todas esas triquiñuelas que encierra un proceso de elecciones. Ningún partido se salva.    

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Solo en este marco, podremos entender lo que acontece en el partido de Ezequiel Rojas, José Hilario López, Rafael Uribe, Alfonso López Pumarejo, Benjamín Herrera y Jorge Eliécer Gaitán, entre otros.

*Los contradictores de Olga B.*

Trasladando la política del menudeo al escenario de lo que está sucediendo en el departamento con el partido Liberal, tendremos que presentar las dos versiones que hemos recogido empezando por los contradictores de la congresista Olga Beatriz González. Ellos señalan que la dirigente liberal solo se ha preocupado por ubicar en los cargos públicos a sus familiares y personas que nunca han tenido ninguna actividad en el partido Liberal como es el caso de la polémica y cuestionada expersonera de Ibagué Francy Johana Ardila Salazar.

Según las afirmaciones de los críticos de Olga B, Ardila Salazar, habría llegado a dirección regional de la Agencia Nacional de Tierras del Tolima, gracias a los oficios del diputado Carlos Reyes y del concejal Javier Mora, el dúo dinámico, quienes habrían llegado a un acuerdo con el exalcalde Andrés Fabián Hurtado, consistente en un  intercambio de favores a través de puestos y contratos, para que la pareja de ‘parceros del liberalismo’, le consiguiera puesto a la exrepresentante del ministerio Público de Ibagué en el gobierno de Petro a través de la Representante Olga B, gestión que se cumplió a cabalidad.

Como se sabe, la expersonera Ardila Salazar, cumplió su labor como un secretario más del despacho de Hurtado, tapándoles todos sus desafueros y faltas en contratación, que como una verdadera representante del Ministerio Público. Esto creó compromisos entre Hurtado y Ardila Salazar, que por razones de inhabilidad no podía quedar como funcionaria del municipio y tuvo que acudir (Hurtado) a sus amigotes, los paladines del liberalismo Reyes y Mora, para que le ayudarán a conseguir puesto a su expersonera de bolsillo.

Igualmente, las fuentes que ocupan cargos en la dirección Liberal del Tolima, pero que pidieron su reserva, indican que la Representante Olga B. nunca les consulta ni informa sobre sus decisiones políticas que comprometen al liberalismo y que, actua como una rueda suelta, desconociendo incluso, la jefatura de Mauricio Jaramillo.

Estas actuaciones, de desconocer al máximo dirigente liberal del departamento, como a los dirigentes de los municipios y varios exalcaldes, ha creado inconformismo al interior del liberalismo, que habría concluido con una advertencia de Jaramillo, en el sentido que Olga B. no contaría con su apoyo en las próximas elecciones para ningún cargo de elección popular. Esta versión es un rumor y no ha sido confirmada ni negada por el exsenador Mauricio Jaramillo.

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*Habla Olga B,*   

En una charla que sostuvimos con la Representante Olga Beatriz González, negó cualquier enfrentamiento tanto con Jaramillo como con exalcaldes o dirigentes de su partido.

Dijo que como en toda actividad partidista, existen los desacuerdos y las diferencias naturales que deben registrarse, y agregó que sus relaciones con Mauricio Jaramillo son buenas, pese a que hace algunos días no se hablan.

“Mauricio Jaramillo, dejó en manos de los diputados Carlos Reyes, Julio César Morato y las mías, la dirección del partido, mientras él adelanta un periodo de descanso y de trabajos personales en el campo de las actividades económicas que realiza como constructor y labores dedicadas a la ganadería y el campo. En este marco, yo como congresista estoy trabajando en la organización de la próxima convención del liberalismo que se realizará a finales de septiembre en Cartagena, lo mismo que en la escogencia de delegadas al encuentro de mujeres y juventudes, que se realizará dentro del marco de esta convención nacional del partido”, manifestó Olga Beatriz González.

Agregó que: “Estoy trabajando conjuntamente con la gobernadora Adriana Matiz y la alcaldesa Johana Aranda, para traer recursos y proyectos productivos para Ibagué y el Tolima. Mi carácter de mujer empresaria, me impide mirar con sectarismos el desarrollo del departamento. Debemos unirnos todos para trabajar conjuntamente por la grandeza del Tolima, dejando por fuera zancadillas y rencillas políticas que nada bueno le traen a la región”.

Sobre el caso de la expersonera de Ibagué, Francy Johana Ardila Salazar, expresó que no era cierto que su nombramiento hubiera sido gestionado por el diputado Reyes y el concejal Mora. “Fue el diputado Julio César Morato el que me la presentó. Yo no la conocía ni sabía a qué corriente política pertenecía, no me interesa el color político, sino que sea buena funcionaria, y según los informes que tengo, ella en su nuevo cargoh a cumplido con su deber y es una buena funcionaría”.

Con respecto a las investigaciones que cursan contra Ardila Salazar, en la Procuraduría por irregulares cobros de viáticos que pueden superar los 55 millones de pesos, en su condición de Personera de Ibagué, la congresista Liberal dijo no tener conocimiento y se abstuvo de pronunciarse al respecto.  

Igualmente, la dirigente Liberal sostuvo que se encuentra inmersa en un trabajo de reencuentro con liberales que se han retirado del partido por diversos motivos, la construcción de partido con nuevos militantes, y de arreglos y modernización locativa de la sede de Ibagué en la 19 con 8ª del barrio Interlaken.

La congresista González, le restó importancia a los rumores y versiones sobre un supuesto enfrentamiento con el jefe natural de partido Liberal del Tolima, Mauricio Jaramillo, y dijo que está dedicada a trabajar, por ejemplo, en que el gobierno del presiden Petro cambie su decisión de llevar los Juegos Deportivos Nacionales para los departamentos de Sucre y Córdoba y los deje en Ibagué. 

Como se observa, esta pelea Liberal no representa más que una puja por el clientelismo tan común en el sistema político tolimense y colombiano.