Una de las poblaciones que más llama la atención en el mundo son los denominado o etiquetados como los NiNI, personas jóvenes que no trabajan, tampoco estudian ya sea por decisión propia o por falta de oportunidades de trabajo o de estudio.

Y es que al relacionarlos con la tasa de desempleo, estos ciudadanos entre los 14 y 28 años y que representan el 34,9% de la población, se convierten en epicentro de la discusión desde lo económico y social.

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En el último informe presentado por el Departamento Administrativo Nacional de Estadística (Dane), el porcentaje de la población de jóvenes “NINIS” en Colombia, para el trimestre de mayo a julio, fue de 33%, un aumento de 11 puntos porcentuales con respecto al 22% del 2019.

 “La existencia y el ascenso de los 'ninis' se debe a que una gran proporción de las estrategias e iniciativas de empleo, que se están impartiendo desde el orden nacional, se están centrando en crear programas de formación laboral, pero dejan de lado la problemática principal que es crear oportunidades de empleo para que estos jóvenes que están siendo formados, logren vincularse al mercado laboral”, indicó la economista, Natalia Mejía Franco a medios nacionales.

Tolima

El problema de los jóvenes en el Tolima es de marca mayor, la tasa de desempleo de este rango de poblacion ocupa los primeros reglones en el país y debe consolidarse en la región no desde sendos estudios sino desde realidades políticas públicas que permita ayudar a los tolimenses.

 Recordemos que Ibagué históricamente ha estado en los últimos 15 años ocupando los tres primeros lugares en desempleo. 

 “Renuncié a mi puesto anterior porque tenía una conversación con otra empresa para cambiar de trabajo, pero a causa de la pandemia no pudieron contratarme. He intentado conseguir trabajo, pero es muy difícil porque no tengo mucha experiencia laboral. Mando diariamente alrededor de 50 hojas de vida”, dijo la ingeniera Maria Fernanda Sánchez. 

El panorama sociodemográfico de la juventud en Colombia, realizado por el Dane, indicó que el 42% de las mujeres y el 23% de los hombres jóvenes no estaba laborando ni estudiando, dando cómo resultado una brecha de género de 19 puntos porcentuales, indicador nada esperanzador para un país con tanta desigualdad.