El pasado sábado 10 de agosto, la alcaldesa del Líbano Beatriz Valencia, se vio obligada a retirar el proyecto de Acuerdo que había presentado al Concejo Municipal, a través del cual solicitaba autorización para tramitar un empréstito por $3.000 millones.

El argumento expuesto para el retiro del polémico proyecto, el ejecutivo lo basó en que faltó incluir en la solicitud un mayor número de oferentes financieros que serían la base fundamental para su respectivo estudio por parte del Concejo. Dice la comunicación de la Alcaldesa, que insistirá en la presentación del proyecto en las sesiones ordinarias o extraordinarias de fin de año.

Sin embargo, hay quienes dicen que el motivo real para haber optado por el retiro del mencionado proyecto, tuvo su origen en la presión ciudadana que empezó a sentir la administración, y porque era un hecho que el Concejo le negaría su aprobación. Es decir, con el retiro del proyecto, la Alcaldesa lo que hizo fue evitar que la derrota política y administrativa fuera más aplastante.

• Puede leer: Juzgado confirma sanción contra Alcaldesa de Líbano

Desde el momento que se conoció la pretensión por parte de la administración municipal de buscar un cupo de endeudamiento, voces de diferentes orillas empezaron su férrea oposición. “La alcaldesa Beatriz no nos puede salir ahora con cuentas alegres, la fácil es endeudar al municipio, no señora haga gestión, para eso tiene el grupo político que manda en el Tolima para que la respalde, tiene al señor Choco y al representante Alejandro Martínez, que acuda a ellos para que le ayuden a gestionar”, le dijo a El Cronista.co un líder del corregimiento de El Convenio.

Hay que anotar que el fallido proyecto de Acuerdo con el que se pretendía la autorización del empréstito por $3.000 millones, tenía como objeto la compra de un kit de maquinaria amarilla y adquisición de materiales para el mantenimiento y reparación de vías urbanas del municipio.  “Inadmisible que se pretenda hacer un empréstito para arreglar calles, eso es lo más absurdo que se puede hacer, al cabo de un año esas calles que arreglan mediante un préstamo, vuelven a estar dañadas o bien porque no hacen con calidad el trabajo o no hacen mantenimiento y la deuda sí le queda al municipio, lo más lógico para este tipo de obras es que le pida ayuda a la Gobernadora”, aseveró un exconcejal del municipio.

• Lea también: Las primeras molestias con la Alcaldesa del Líbano

En ese mismo sentido, el gestor cultural y veedor, Braulio Anacona se expresó frente a esta polémica propuesta de la alcaldesa Beatriz Gómez. “En dónde están los amigos de la señora alcaldesa que llevan años en el Congreso y han ocupado cargos en la Asamblea Departamental y que hoy en día se pavonean en los diferentes corregimientos y veredas, ahora sí se acordaron que existen nuestros amigos campesinos. No podemos permitir esos endeudamientos innecesarios por la pereza de gestionar”.

“No soy la de Choco”

Para algunos, en 7 meses de gobierno, la Alcaldesa del Líbano que llegó investida con una aureola de mucha expectativa y esperanza de cambio, sobre todo después de dos funestas administraciones, esa ilusión ha empezado a desvanecerse. Quizás la misma Alcaldesa labró ese camino de incertidumbre que hoy enfrenta cuando en la recta final de la campaña en un afán de declararse independiente para asegurar el triunfo, afirmó que no era ni de Choco ni de Barreto y además le quitó el apoyo a la entonces candidata y hoy gobernadora Adriana Magali Matiz, cuando todo el mundo sabe que Beatriz Valencia pertenece al equipo del exrepresentante Choco y tiene por supuesto afinidad con el barretismo.

• Le puede interesar: En el Líbano ganó la que dijo que “No soy ni la de Choco ni la de Barreto”

Quizás por ello, precisamente el exrepresentante José Helver Hernández hace poco pregonaba que debían estar más unidos “porque quieren dividirnos”, cuando la que fomentó la división desde la misma campaña fue la hoy alcaldesa Valencia.

Entonces, con un Concejo Municipal donde ha perdido las mayorías, demostrado cuando le acaban de hundir un proyecto fundamental como es el de la reestructuración administrativa, su equipo de asesores no funciona y la demanda de su elección por doble militancia sigue su curso, no son fáciles los días por los que atraviesa la alcaldesa Beatriz Valencia Gómez. “Hasta la fecha la única gestión que ha mostrado es aparecer en las redes sociales haciendo anuncios, pero nada de concreción, esperemos que enderezca el rumbo porque administrar el Líbano no es lo mismo que Murillo”, dijo otro líder y veedor ciudadano.