La gerente de la Empresa Ibaguereña de Acueducto y Alcantarillado, IBAL, Érika Palma Huertas, en comunicado de prensa del día miércoles 12 de octubre, confirmó que las obras que se adelantan en los conjuntos que conforman el complejo habitacional Arboleda del Campestre, ubicado en el sector de Picañeña, para mejorar el acceso al agua potable, están en un 95% de ejecución.

"Hoy nos encontramos en el 95% de ejecución de las obras que nos comprometimos con el alcalde Andrés Hurtado, con la finalidad de buscar soluciones a la problemática de agua potable en este punto de la Capital Musical", señaló gerente Palma, al tiempo que destacó que “todo fue posible gracias al convenio entre el IBAL y la Constructora Bolívar”.

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Pronunciamiento de VAPI

Ante esta situación, este jueves la veeduría VAPI hizo un fuerte pronunciamiento donde, pide la intervención urgente de todos los órganos de control para que “se revise a fondo y de manera inmediata, el Convenio suscrito entre la alcaldía municipal de Ibagué, el IBAL S.A.E.S.P. y la Constructora Bolívar, entorno a las soluciones de acueducto y alcantarillado para el Complejo Habitacional Arboleda del Campestre”.

Afirma la veeduría VAPI que “Este es un convenio leonino, dañino y perjudicial para la ciudad, con el cual se pretende solucionar los negociados que desde el IBAL se hicieron con disponibilidades hidrosanitarias y ahora se profundiza el daño que se le hace a la ciudad”.

Aclara VAPI que es urgente encontrar una solución de acueducto y alcantarillado a la Arboleda del Campestre, “pero no profundizando el daño que se le quiere hacer a la ciudad”.

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Concluye el llamado de esta veeduría ciudadana que resulta “Extremadamente importante para la ciudad que se haga esta revisión, porque en él se están entregando intereses estratégicos para la vida presente y futura de la ciudad capital del departamento del Tolima”.

Informe Contraloría

A propósito de lo que ha venido ocurriendo en el Complejo Residencial Arboleda del Campestre, la Contraloría General de la República, Gerencia Regional Tolima, hace poco terminó una investigación, donde puso en evidencia las graves anomalías que allí se han presentado con el tema del agua y en el que el IBAL no sale bien librado.

Según el informe de la Contraloría, el Instituto Ibaguereño de Acueducto y Alcantarillado, IBAL, ha venido en los últimos años concediendo a constructores, disponibilidades hidrosanitarias sin ninguna garantía del preciado líquido. Las disponibilidades entregadas han sido condicionadas.

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Esta situación, como en el caso de La Arboleda del Campestre, ha desencadenado en que cientos de familias hayan terminado comprando una vivienda sin garantía del servicio de agua y la poca que tienen no es apta para el consumo humano. Eso ha ocurrido en la Arboleda del Campestre, lo padecen en Alminar Samoa y también en otros proyectos urbanísticos de la ciudad.