[LetraCapital Letra="L"]a campaña por la refrendación del Acuerdo final que ponga fin al conflicto armado interno en Colombia está disparada, también en el Tolima. La inscripción de comités promotores dan cuenta de esto.

Las encuestas muestran que se superaran las expectativas nacionales que se tenían cuando el Congreso de la República aprobó el Proyecto de Ley, más del cincuenta y tres por ciento saldrá a votar, y de ellos el Sí obtiene de lejos los 4 millones trescientos mil votos, inclusive la diferencia a favor del Sí es de dos a uno con relación al No según la mayoría de las últimas encuestas.

Pocas elecciones se realizan sin candidatos, esta es una de ellas, no se está votando a favor o en contra de alguien, o por un partido político u otro, lo que hay es un sueño y una idea de futuro: Una Colombia en Paz que inicia terminando el conflicto armado interno con las Farc, en el Tolima sabemos lo importante que es terminar la guerra. Finalizar el conflicto es una condición necesaria pero no suficiente para alcanzar la paz,  y el solo hecho de que ningún colombiano vuelva a morir a causa del conflicto es suficiente para muchos de nosotros.

Sin embargo, como en el fútbol, el resultado no se sabrá hasta que se acabe el partido; es decir, para este caso, hasta que se cuenten los votos, los amigos de la democracia deberemos no bajar la guardia y seguir invitando a votar el primer domingo de octubre.

Ahora bien, cómo en toda elección política el elector espera saber qué ganará participando en el plebiscito. La respuesta, aunque compleja es evidente: todos podremos vivir en un mejor país.

El Tolima lleva cincuenta años en guerra, mi generación no ha vivido un solo día en paz, hemos pagado el costo de la guerra sin haberla provocado, y aunque pareciera que el país ya se acostumbró a vivir así, la verdad es que tenemos el derecho de soñar y construir una nueva nación. Sí miramos en el fondo de nuestro corazón encontraremos el espíritu de la solidaridad y la reconciliación.

A estas alturas, el elector ya sabe que ganando el Sí, el camino por la paz continúa con mayor fuerza su recorrido. En esta elección, a diferencia de todas las otras, la gente asistirá a las urnas de manera libre y espontánea, sin que se le convoque con una dádiva o una motivación individualista. El elector sabe que votando aportará a construir un mejor país, una nación unida y vigorosa.

El sueño colectivo de la paz en nuestro departamento es muy grande, la mayoría de tolimenses saben el gran potencial del Tolima si se viviera en paz. Sí en medio de la guerra el Tolima es lo que es, todos sabemos lo que podríamos ser si se terminara el conflicto y los dineros del Estado en lugar de invertirse en balas y soldados se invirtieran en libros y profesores.