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Mayor Molano trató de inculpar a otro policía, pero fue enviado a la cárcel

Mayor Molano trató de inculpar a otro policía, pero fue enviado a la cárcel

A la 1:30 de la madrugada de este viernes finalizó la audiencia concentrada, en la que finalmente se impuso medida de aseguramiento en establecimiento carcelario, a Jorge Mario Molano, oficial de policía acusado de asesinar a Santiago Murillo en Ibagué, el pasado primero de mayo.

A lo largo de la diligencia, antes de tomar la decisión de enviar a la cárcel al policía, la Juez Quinta de Control de Garantías reveló la posible manipulación de testigos para favorecer a Molano, y la culpabilidad que el oficial busca enrostrar a Oscar Leonardo Devia, patrullero de la Policía Metropolitana de Ibagué (Metib).

La Juez aseguró que una de las pruebas de mayor peso es el proyectil encontrado en el cuerpo del joven Santiago Murillo, el cual coincide plenamente con el arma de fuego de dotación que tenía a su cargo el Mayor Molano desde el año 2017. “Es uno de los elementos fundamentales para estructural la inferencia razonable de autoría o participación contra el señor Molano Bedoya”, arguyó la Juez.

En la audiencia la Juez también dijo que el Mayor Molano ha tratado de enrostrar la responsabilidad del homicidio al patrullero Oscar Devia. Sin embargo, la Juez a su vez advirtió que el proyectil que acabó con la vida de Santiago Murillo no coincide con el arma del patrullero Devia, sino con la de Molano.

Molano ha hecho alusión a que éste (Oscar Devia) pudo haber sido uno de los miembros de la Policía Nacional que utilizó el arma de dotación que tenía para la fecha de ocurrencia de los hechos”, informó la Juez.

En su relato, el patrullero Devia indicó que en la noche del sábado primero de mayo, llegó a la calle 60 con carrera Quinta, y el Mayor Molano lo hizo bajar de la motocicleta en la que se transportaba junto a otro policía. Después de bajarse, Molano le habría pedido el casco al patrullero Devia, y se retiró del lugar de los hechos.

El patrullero Devia advierte es no es normal que un oficial le diga que se baje de la motocicleta, como al parecer lo habría hecho el mayor Molano Bedoya; que es la primera vez en 18 años de servicio que ello le pasa, y tampoco es normal que les pida el casco prestado”, relató la Juez.

Asimismo, el informe de la Fiscalía General de la Nación señaló que patrulleros de la Metib han denunciado presiones por parte de funcionarios de la Policía, para que cambien sus testimonios sobre lo ocurrido en la noche del primero de mayo.

“La información con la que se cuenta, indica que al parecer existiría un entramado de diferentes personas, de la Policía Nacional y la Justicia Penal Militar, que lo que pretenden es endilgar la responsabilidad al patrullero Devia”, aseveró la Juez.

No obstante, la Juez hizo énfasis en que, el arma de dotación del patrullero Devia no fue detonada esa noche, pues devolvió todos sus proyectiles asignados. En cambio, el Mayor Molano presentó cuatro balas menos, de las 45 que debía tener.

De otro lado, la Juez recalcó que, según una interceptación de la Fiscalía, el padre del Mayor Molano habría pagado un millón de pesos para obtener la prueba balística que compromete a su hijo. Lo que representa una presunta obstrucción a la justicia.

El abogado defensor de las víctimas Miguel Ángel Del Río, escribió en su cuenta de Twitter una vez culminada la audiencia que, "después de varios días de audiencias concentradas se impone medida de aseguramiento en establecimiento carcelario en contra del Mayor Molano por el asesinato de Santiago Murillo. Ganamos de manera preliminar las víctimas y la justicia".

Todavía se espera que la Corte Constitucional defina el conflicto de competencia entre la Justicia Penal Militar y la ordinaria, sobre el caso de Santiago Murillo.

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