El Juzgado Segundo Civil Especializado en Restitución de Tierras ordenó a la Alcaldía de Ibagué reubicar en una sede alterna a los estudiantes del colegio Darío Echandía Olaya, mientras se recontruyen las instalaciones principales de esta institución educativa que se encuentran en pésimas condiciones.

El fallo se dio ante una tutela radicada por José Domingo García, padre de Juan David García, quien es el personero estudiantil del colegio Darío Echandía. El padre de familia pidió que se protejan los derechos a la educación y vida digna de su hijo, lo cual amparó el juez. 

Hace más de tres meses el alcalde Andrés Hurtado reconoció que la planta física del colegio Darío Echandía se debía demoler, por el alto nivel de deterioro que alcanzó. Sin embargo, a la fecha no se conocen mayores avances en el proceso de demolición y reconstrucción.

Asimismo, hace dos semanas el secretario de Educación, Juan Manuel Rodríguez, le confirmó a El Cronista.co que los estudiantes del Darío Echandía seguirían en clases virtuales a partir del 12 de julio cuando regrese la presencialidad, pues su planta física impide desde todo punto de vista el cumplimiento de protocolos de bioseguridad.

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No obstante, el fallo de la tutela interpuesta por el padre del personero estudiantil, no contempla seguir en clases virtuales. 

"La solución temporal para los estudiantes de la institución educativa Darío Echandía sería una reubicación de forma que se les permita gozar de la presencialidad de sus clases, garantizándoseles de esta manera su derecho a la educación", arguyó el despacho. 

Por tanto, ordenó a la Alcaldía de Ibagué "que reubique a todos los estudiantes inscritos en todos los grados y jornadas escolares en este año lectivo, y, al personal académico y administrativo que trabajen en la institución educativa Darío Echandía Olaya, de forma temporal, en otro sitio donde puedan asistir el 15 de julio de 2021 a clases presenciales o de alternancia".

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A su vez, el juez pidió que se agilice la demolición y pronta construcción de la nueva sede. "Obteniéndose en el menor tiempo posible la materialización de la obra, que asegure el pleno desarrollo de la personalidad y dignidad de los estudiantes y el bienestar general de la comunidad educativa del plantel", concluyó.

El fallo abre una puerta para todos los demás colegios con pésimas condiciones de infraestructura, que prefieran ser trasladados temporalmente a otra sede, en lugar de seguir en clases virtuales.