El empresario hondano Miguel Merino Gordillo, no se queja ni busca excusas por difíciles que sean los tiempos. Y ese optimismo lo lleva a emprender nuevos retos todos los días.

Además de figurar como uno de los urbanizadores del Ibagué moderno, también dejó su huella en la administración departamental como exgobernador y exministro de Desarrollo y Economía; posteriormente regresa al sector privado como representante de la franquicia para Colombia de Dunkin Donuts, cadena internacional de cafeterías, cuyo producto bandera son las famosas rosquillas y ahora los helados  Baskin Robbbins.

Desde el viernes pasado, la franquicia de Merino tiene un nuevo local en la calle 42 con carrera 5ª de Ibagué, para completar así 12 puntos de venta en la capital del Tolima que generan en su conjunto 52 empleos formales directos, de las 950 que ofrecen en los 190 puestos que tiene en todo el país, donde se incluyen ciudades como Bogotá, Cali, Medellín, Barranquilla, Pereira y Palmira, entre otras.

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El presidente de Dunkin Colombia, dice que “no obstante las dificultades que atraviesa el país, no es tiempo para mirar atrás sino para emprender nuevos rumbos y metas que nos permitan salir de la crisis”. En tales circunstancias, surge la  nueva cafetería de la marca Dunkin, en un sitio tradicional de Ibagué (La Macarena), que forma parte fundamental del desarrollo comercial y financiero de esta ciudad.

En medio de la crisis sanitaria mundial y del paro nacional indefinido, Merino deja su impronta creando nuevos puestos de trabajo y ofreciente oportunidades para mostrar otro rostro de la ciudad de Ibagué. Este dirigente y empresario siempre ha mostrado su compromiso con la ciudad, sin cálculos políticos ni de prebendas oficiales.     

En las actuales circunstancias y la incertidumbre que nos rodea, la apertura de un local comercial, una fábrica, una entidad de servicios, significan puestos de trabajo que, en suma, son los que se necesitan para combatir el desempleo uno de los grandes y graves problemas que afronta la ciudad, el departamento y la nación.

El surgimiento de esta nueva cafetería de Dunkin de Merino, así sea un mínimo aporte, es una respuesta positiva a esa crisis nunca antes vivida por el pueblo colombiano.