Por Humberto Leyton

La paradoja de las festividades folclóricas de la capital del Tolima es una foto tomada de las ruinas de la otrora emblemática Concha Acústica “Garzón y Collazos”,(Ver video) por algún cibernauta que se ha hecho viral en las últimas horas en las redes sociales, en la que se refleja la contradicción de una celebración alegre y la denuncia incontrovertible del abandono y la corrupción de la ciudad.

La imagen es la esencia viva y el recuerdo de una administración que dejó a Ibagué en la bancarrota con altos niveles de postración, que lo hacen un municipio inviable si nos atenemos, a que la sucesora que dejó Hurtado, sigue la continuidad de su mal gobierno, y no hay mucha diferencia entre el pasado y el presente.

Y parece que esta es la idea que captan los comentarios que se hacen sobre la fotografía en referencia. “El legado cultural i artístico que dejó Andrés Hurtado y que Johana Aranda está empeñada en continuar…San Juan…San Juan… San Juan”, dice la leyenda sobre la crítica imagen del escenario referente en años pasados de los principales eventos del Festival Folclórico Colombiano, incluyendo la coronación de la reina de las festividades.

Y otro fotomontaje, en forma burlesca y mordaz, el abogado Fernando Varón Palomino, pone en la parte superior la foto viral de la denuncia del deplorable estado de la concha acústica, y en la inferior, la foto de la lujosa mansión del exalcalde Hurtado, edificada en su administración, valorada por los especialistas en más de seis mil millones de pesos, y en un círculo la foto del cuestionado exfuncionario municipal, con la leyenda: “Mi casa está de fiesta. 50 años Festival Folclórico Colombiano”. 

Luego se registra otra foto donde aparecen un grupo de artistas, jóvenes y ciudadanos,  aseando el lugar tan despreciado por los que mandan, pero tan apreciado por los ciudadanos, donde según el gestor cultural Víctor Sánchez, se muestra que la concha “tiene dolientes”. En esta fotografía también se muestran varias pancartas, donde se destaca una que dice: “No estamos de rumba. Mi casa se derrumba”.

Este material fotográfico, además de convertirse en imágenes de denuncia, es un registro visual de la trágica historia que ha vivido la Ciudad Musical de Colombia en los últimos cuatro años y medio, donde uno de sus símbolos como el parque Centenario, se encuentra en una dejadez nunca antes vista, ni siquiera en los peores momentos como escenario recreativo y cultural de los ibaguereños.

Las dos últimas administraciones municipales prefieren pagar millonarias sumas por el montaje de carpas y estructuras móviles,  que remodelar el parque Centenario, escenario natural para realizar estos acontecimientos tal y como lo denuncia el abogado Luis Felipe Aranzalez en su columna: *Las fiestas de la corrupción y el derroche en Ibagué*, publicada en este portal. 

Agregándose a ello, las reiteradas denuncias por elevados sobrecostos, los malos diseños y la falta de planificación que la administración Hurtado dispuso en las licitaciones públicas para la rehabilitación del parque Centenario.  La última de ellas adelantada por la alcaldesa Johana Aranda, que se cayó por ser una copia de la publicada por su mentor Hurtado. 

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Sin duda, la falta de transparencia en la contratación y las chambonerías de Hurtado así como las de la señora Aranda, hasta el momento, son los factores fundamentales que han impedido la remodelación del parque Centenario y de su Concha Acústica, escenario principal de eventos artísticos y culturales de Ibagué.

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Aclaramos que no estamos en contra de las fiestas ni de las actividades folclóricas que se realizan, son patrimonio de los tolimenses, lo que reclamamos en más honestidad en el manejo de la cosa pública, y sobrada razón tienen los ciudadanos que de una u otra forman protestan por el olvido y abandono de sus sitios de encuentro, de recreación y escenarios culturales.

Las fotos virales de la concha acústica “Garzón y Collazos”, es la cuenta de cobro de los ciudadanos a una administración municipal corrupta, y un mensaje claro de que la gente no olvida…tiene memoria.