Análisis
Los límites del poder y la responsabilidad del periodismo: lo que nos recuerda el caso Petro-Semana

Por Jorge Medina
*Estudiante de Comunicación Social y Periodismo Unibagué
La periodista Yolanda Ruiz, destacó durante el Festival Gabo que el periodismo de opinión debe sustentarse en hechos verificados y no en suposiciones
En un país donde los titulares pueden dirigir el debate político y los trinos en la red social X se usan como canales oficiales para responder a los medios, volvió al centro de la conversación pública una nueva polémica entre el presidente Gustavo Petro y la revista Semana. En esta ocasión, tras la publicación de una noticia que asocia presuntas coimas dentro de la UNGRD para impulsar la reforma pensional en el Congreso, el mandatario respondió de forma directa en su cuenta de X, calificando de “mentiroso” al director de ese medio, Yesid Lancheros.
La noticia que se menciona se refiere a una solicitud de la Corte Constitucional ante distintas instancias judiciales para obtener copias de testimonios y pruebas dentro del escándalo de corrupción de la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD). Entre los documentos requeridos están las declaraciones de Olmedo López, exdirector de la UNGRD, y de su subdirector Sneyder Pinilla.
En medio de ese proceso, la revista Semana publicó que, según la exconsejera para las Regiones Sandra Ortiz, parte de los recursos desviados habrían sido usados para favorecer la elección de Vladimir Fernández como magistrado de la Corte Constitucional, autoridad judicial que tiene hoy en su poder la decisión sobre la constitucionalidad de la reforma pensional del gobierno.
El presidente Petro reaccionó señalando que la información es falsa y, en su defensa, relató públicamente el proceso legislativo de la reforma, señalando que fue obstaculizada durante siete meses por el presidente del Senado, Iván Name. También aseguró estar dispuesto a declarar ante la Corte Suprema sobre los hechos, pero al mismo tiempo descalificó al director Lancheros.
En su trino, el mandatario escribió: “No hay acción de soborno mía sobre un contradictor político que considero bajo y ruin, como Name”. Si bien negó las acusaciones, el tono generalizado y acusador de sus mensajes recuerda episodios anteriores que han generado críticas, como cuando calificó a algunas periodistas como “muñecas de la mafia” una expresión que fue cuestionada por organizaciones como la Fundación para la Libertad de Prensa (FLIP), lo que reavivó la controversia sobre su relación con los medios de comunicación.
La periodista Yolanda Ruiz, referente en ética periodística, destacó durante el Festival Gabo 2023 que incluso el periodismo de opinión debe sustentarse en hechos verificados y no en suposiciones. En ese sentido, el hecho de que la información publicada por Semana incluya elementos no respaldados judicialmente, como las declaraciones de la exconsejera Sandra Ortiz, cuando se usan declaraciones que todavía no han sido confirmadas por la justicia como base de una noticia, y no se aclara que son preliminares, es normal que la gente empiece a dudar si lo que se dice es verdad. Eso puede afectar la confianza en el trabajo periodístico.
Ruiz a su vez destacó la importancia respecto a que los medios actúen como veedores del poder, con el firme compromiso de trabajar bajo las reglas del periodismo, especialmente en un contexto de polarización política, donde las publicaciones pueden tener un impacto considerable en la opinión pública.
En medio de la controversia, es clave recordar que la verificación, la claridad en la diferenciación entre hechos y supuestos, y el compromiso con la rigurosidad son principios esenciales del periodismo. En este contexto, la cobertura del caso UNGRD, la reforma pensional y sus implicaciones institucionales no pueden reducirse a una simple disputa en redes sociales, sino que requieren un enfoque detallado, contextualizado y responsable, que sea fiel a la verdad y que aporte al debate democrático de forma significativa.
(CO) 313 381 6244
(CO) 311 228 8185
(CO) 313 829 8771