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No hubo quórum en proyecto de Ley para prohibir las “Terapias de Conversión”

No hubo quórum en proyecto de Ley para prohibir las “Terapias de Conversión”

El proyecto de Ley 270-S, que busca prohibir las terapias de conversión, también conocidas como terapias ECOSIEG (Esfuerzos de Cambio de Orientación Sexual e Identidad y Expresión de Género), se encuentra en un punto crítico. Tanto defensores como opositores están luchando intensamente por el futuro de esta iniciativa.

El debate sobre la aprobación del proyecto de ley 270-S se lleva a cabo en la Comisión Primera del Senado, donde ya ha tenido dos sesiones de discusión. Este proyecto tiene como objetivo poner fin a las prácticas coercitivas a las que son sometidos muchos colombianos y colombianas miembros de la población LGBTIQ+.

La semana pasada, el Congreso recibió 40,000 firmas de ciudadanos que apoyan la aprobación del proyecto de ley. Sin embargo, la oposición también hizo sentir su voz, presentando cerca de 270,000 firmas en rechazo a la iniciativa. La senadora Lorena Ríos lidera esta oposición a través de la campaña “Con mis hijos no te metas”, argumentando que el proyecto de ley “pondría en grave riesgo a la población menor de edad”.

A la senadora Ríos se unieron María Fernanda Cabal y Jonathan Pulido, quienes buscan hundir el proyecto 270-S, argumentando vicios de trámite e inconstitucionalidad. Sostienen que, de ser aprobado, se violaría “el principio de prevalencia de los niños, niñas y adolescentes, ya que restringe el derecho de estos a ser educados bajo la autonomía de sus padres”.

En la carta presentada junto con las firmas, los opositores también indican que el proyecto 270-S impondría trabas innecesarias al Sistema de Salud, ya que impediría que los profesionales de la salud puedan emitir diagnósticos de disforia de género y tratarla adecuadamente.

Por otro lado, los activistas de la población LGBTIQ+ respondieron a estos comentarios, afirmando que la disforia de género ya no es reconocida por la Organización Mundial de la Salud (OMS) en su manual de clasificación CIE-10. En su lugar, se utiliza el término "incongruencia de género". La diferencia radica en que la disforia de género describe una angustia experimentada por la persona que no se identifica con su sexo biológico, mientras que la incongruencia de género describe una experiencia significativa y persistente de incompatibilidad, lo que hace al paciente apto para la reasignación de sexo mediante tratamiento médico-quirúrgico.

Se espera que el debate se reanude mañana, miércoles 12 de junio, a las 9:00 de la mañana, donde se definirá el destino del proyecto ECOSIEG. El resultado de esta votación será crucial para determinar si Colombia avanzará hacia la prohibición de las terapias de conversión y la protección de los derechos de la población LGBTIQ+.

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