Con la llegada de José Edgar Bonilla como secretario de Desarrollo Agropecuario de la gobernación del Tolima se abren muchas expectativas de lo que pueda pasar con esa cartera en lo que resta del gobierno del  mandatario Oscar Barreto Quiroga, más cuando dicha dependencia en la actualidad se encuentra en el ojo del huracán por lo sucedido con los campesinos del municipio de Rovira. 

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Bonilla es de origen conservador, nació en la casa del GomezGallismo, es un referente en el campo medio ambiental, debido a su trasegar por la Corporación Autónoma Regional del Tolima, entidad donde laboró durante más de 20 años, ocupando al final el cargo de director en dos períodos consecutivos debido a su buena gestión, lo que llevó a los alcaldes de la época a reelegirlo.

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Dentro de sus retos macro está el jalonamiento de recursos del orden nacional para la culminación del proyecto más ambicioso del Tolima como es el Triángulo Sur del Tolima, iniciativa que está en segunda fase y que requiere para su tercera y fase de ejecución más de medio billón de pesos. Cabe resaltar que el gobierno nacional ha dicho ya en repetidas ocasiones que esos dineros no llegarán, dejando así uno de los proyectos sociales de mayor impacto ala deriva. 

De igual manera, esta la consolidación de las diferentes cadenas productivas de la región, empezando por la del mismo aguacate Hass que ya arrancó, pero requiere de mayor apoyo por parte de la secretaria de Desarrollo Agropecuario. Y la cadena del arroz que esta en cuidados intensivos en la región al igual que en Colombia como lo hizo saber el economista y periodista  Silverio Gómez que ya alertó sobre la difícil sitiuación que vivirán los productores del grano en los próximos semestres.