El Cronista.co se dio a la tarea de hacer un sondeo en los 47 municipios del Tolima para medir la gestión de los alcaldes con motivo de sus dos primeros años de mandato.  El balance no es el más halagador.

Solo tres alcaldes salen bien librados: el de Mariquita, Juan Carlos Castaño Posada, de Murillo, Antonio José García y Planadas, Jhon Jairo Hueje.  Castaño, porque según la comunidad ha mostrado capacidad de liderazgo, ha sido un mandatario que ha estado cerca del sector rural y la apuesta que ha hecho por el sector educativo de Mariquita y el norte del Tolima con hacer realidad la U. del Tolima en el municipio, iniciativa que ha tenido todo el acompañamiento del gobernador Ricardo Orozco.

El alcalde García de Murillo, porque se ha metido de lleno en el empeño de convertir a Murillo en un destino turístico atractivo. Su gestión se ha distinguido por su alto nivel de compromiso y seriedad.

Jhon Jairo Hueje de Planadas, en estos dos primeros años ha corroborado lo que fue su primera alcaldía, estar cerca a la gente para hacer verdadera gestión y atender con responsabilidad a sus gobernados.

Dos años electorales

Mientras un grupo intermedio, escasamente ha cumplido un trabajo decoroso, en tanto que la mayoría, se rajan en su gestión.

Dentro de los alcaldes que llegan a la mitad del periodo de gobierno, de acuerdo con el sondeo realizado, aparece liderando una imagen desfavorable, el alcalde de Ibagué, Andrés Fabián Hurtado. En estos dos primeros años de gobierno, el alcalde Hurtado no logró tener una conexión asertiva con la ciudadanía, lo que se tradujo en crítica permanente.  

“Por más que el alcalde Hurtado y su equipo asesor se esfuercen en mostrar que están haciendo, el grueso de los ibaguereños perciben un alcalde distante y  desenfocado. Mientras Hurtado siga en esa burbuja, pensando que él es el centro de todo,  no va a lograr que la gente lo reconozca como un mandatario cercano y comprometido con la ciudad ”, le dijo a El Cronista.co un exfuncionario de la actual administración municipal.

 Lo cierto es que vienen dos años difíciles, que son prácticamente electorales, (en el 2022 elección de Congreso y Presidente y Vicepresidente y en el 2023, la elección de gobernador y alcaldes), lo que hace más compleja la situación no solo para el alcalde de Ibagué sino del resto de mandatarios del departamento.

En el grupo de alcaldes que flotan entre lo bueno y regular de su gestión, aparecen los mandatarios de Alpujarra, Albeiro Trujillo; de Fresno, Jorge Alexander Mejía; y Palocabildo, Nelson Gómez.

En el grupo de alcaldes que hasta el momento no han cumplido la expectativa que generaron en sus electores, y que prácticamente a la fecha están en deuda de acuerdo con los planes de gobierno trazados en los planes de desarrollo, son los alcaldes de Honda, Ambalema, Armero Guayabal, Ataco, Cajamarca, Alvarado, Anzoátegui, Armero Guayabal, Ataco, Cajamarca, Carmen de Apicalá, Casabianca, Coello, Coyaima, Cunday, Chaparral, Dolores, El Espinal, Guamo, Falan, Flandes, Herveo, Honda, Icononzo, Lérida, Líbano, Melgar, Natagaima, Ortega, Piedras, Prado, Purificación, Rioblanco, Roncesvalles, Rovira, Saldaña, San Antonio, San Luis, Santa Isabel, Suárez, Valle de San Juan, Venadillo, Villahermosa y Villarrica.

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Desgaste por investigaciones

Las investigaciones de tipo judicial a las que han sido sometidos buena parte de los mandatarios tolimenses han hecho mella en la mayoría de ellos, pues esos procesos en el momento de enfrentar la defensa, acarrea un desgaste administrativo donde el único perdedor es el municipio.

“Los alcaldes por estar defendiéndose descuidan el compromiso que adquirieron con la ciudadanía y con el municipio”, le dijo a El Cronista.co un concejal del municipio de Valle de San Juan, donde el alcalde elegido el 27 de octubre de 2019 terminó en la cárcel condenado por delitos contra el elector.  

Lo mismo ocurrió con el alcalde de Ibagué, Andrés Hurtado quien antes de ser elegido ya cargaba con una investigación relacionada con un mal proceder cuando se desempeñó como director administrativo del aeropuerto Perales. Los dos primeros años de gobierno estuvo dedicado a defenderse hasta que la investigación fue precluida por vencimiento de términos.

En casos similares están los alcaldes de Cunday, Luis Gabriel Pérez, a quien la Fiscalía en octubre de 2020 le imputó cargos por presuntas irregularidades  en contratación para mitigar la emergencia sanitaria del covid-19; el alcalde de Chaparral, Hugo Fernando Arce, enfrenta dos procesos judiciales, uno de carácter penal por presuntos hechos de corrupción en un contrato para la construcción del coliseo deportivo en el marco de los XX Juegos Nacionales de 2015, En noviembre de 2021 el Tribunal Superior de Ibagué por falsificación en documento privado en el año 2008, lo condena a 16 meses de prisión.

El alcalde de El Espinal, Juan C. Tamayo, la Procuraduría lo citó a juicio disciplinario por presuntas irregularidades en compra de kits de mercado para atender emergencia por covid-19. Para algunos espinalunos, el deseo del Alcalde Tamayo de ser uno de los mejores mandatario del Tolima se desvanece con el correr de los días.

Por su parte el alcalde del Guamo, Rafael Monroy está involucrado en un hecho de presunta corrupción por haberle entregado un contrato a uno de sus aportantes. Este hecho fue denunciado ante los entes de control.

El alcalde del Líbano, Jesús Antonio Giraldo, en el 2020 la Fiscalía 34 le imputó cargos por peculado por apropiación, además el alcalde Giraldo ha sido protagonista de otros escándalos. El municipio presenta un descomunal atraso en los indicadores de gestión.

El alcalde de San Antonio, Jorge Vásquez, la Fiscalía le imputó cargos por presunta corrupción en la contratación durante la emergencia sanitaria del Covid-19.

Quedan dos años y son electorales, por lo tanto, el grado de maniobra que tienen los alcaldes para enderezar el rumbo es reducido. Significa que la suerte de la mayoría de municipios del Tolima está echada y como van las cosas, la expectativa se trasladará al 2023 y de esa manera esperar que  los próximos alcaldes del Tolima logren lucirse y saquen adelante los municipios del Tolima, todos con grandes potencialidades.