En una ceremonia sobria y al mismo tiempo histórica por el significado que tenía debido a la presencia del presidente Gustavo Petro, se cumplió este sábado el relevo en la Dirección de la Policía Nacional.

El presidente Gustavo Petro, quien posesionó al general Henry Armando Sanabria Cely como nuevo Director Nacional de la Policía y a la general, Jackeline Navarro en la subdirección de la institución, envió sendos mensajes sobre lo que debe ser este cuerpo policial.

En el inicio del discurso el presidente Petro dijo que lo que iba a expresar era para el debate, el análisis y la discusión. Volvió a insistir en que para medir los indicadores sobre la seguridad esta no debe hacerse más sobre las bajas sino de las vidas salvadas. “La pericia de un mando o de un oficial o de un comisario debería ser cómo salva la existencia humana que incluye, indudablemente, el desmantelamiento de las organizaciones multicrimen”, dijo el Presidente.

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Dijo también que entre más crezca el concepto de dignidad humana dentro de la institución, más cuidado tendrá la Policía del concepto y de la realidad de la dignidad humana fuera de la Policía Nacional, es decir allá en la vereda, el barrio popular.

En ese punto se refirió en que “La Policía no está para perseguir jovencitos en los parques, no está para tumbarle la carreta de alimentos a un vendedor ambulante. No está para llegar a la casa de una familia campesina y, porque cultivaron hoja de coca, arrastrarlos hasta las cárceles”, afirmó.

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Las tres propuestas

Dentro de los conceptos que emitió y que produjo aplausos, fue cuando se refirió a tres propuestas que según él deben ponerse en práctica.

El presidente Petro pidió “igualdad en la Policía”. “Yo propondría una ya altamente alcanzada: en la Policía, la igualdad entre el hombre y la mujer debe ser una práctica cotidiana”.

Aseguró que “Por mérito, cualquier patrullero debe poder ser general”.  Y agregó que” simplemente por mérito y no porque tuvo un dinero para hacer un curso”. En ese sentido y como argumento señaló que “Si un comandante come en la misma zona que un patrullero, esto, incluso, pues el mejor mando. Es más respetado, es más querido. Es menos distante que cuando se tiene una estación de Policía de 300 patrulleros y de pronto llega un subintendente que jamás ha sido patrullero y no sabe qué es eso y llega a mandar. Ahí se produce la debilidad del mando”, dijo.

La tercera propuesta que hizo el presidente Petro está relacionada con elevar el nivel de escolaridad. Propuso que si se pone en práctica un programa en el cual las personas que entran de patrulleros puedan empezar a acoplar su actividad diaria con la educación superior en todas las disciplinas, se tendría una mejor Policía y más capaz.

Como ejemplo dijo “Qué pasa con un soldado que sabe manejar un fúsil y de pronto sale a la sociedad y ya no es profesional militar y va a pedir un puesto, ¿qué le dicen? Si no es de celador de un edificio, no le dan ningún puesto”, dijo.