Diversas tendencias de grupos alternativos de la política tolimense, buscan sellar hoy un acuerdo que le permita conformar una lista de candidatos a la Cámara de Representantes por el Tolima, en reunión que se cumplirá este viernes 04 de agosto, a partir de las 8:30 AM, en las instalaciones del hotel Ambalá de Ibagué.

Entre las organizaciones que han conformación su asistencia a este evento se encuentran: Progresistas (Gustavo Petro) que en el Tolima orienta Marco Emilio Hincapié, las distintas tendencias de Alianza Verde, Marcha Patriótica, Aico, Mais, Todos Somos Colombia (Clara López), el Partido Comunista, la Unión Patriótica, El Congreso de los Pueblos, y el Polo Alternativo Democrático, representado en Polo-Paz y Polo-Social. No participa Polo-Moir del candidato presidencial Jorge Enrique Robledo.  

Cada movimiento tendrá una delegación entre cinco y diez representantes en este encuentro denominado: Paz, Convergencia y Territorio, que mueve rescatar para el movimiento alternativo una de las seis curules en juego a la Cámara y continuar el esfuerzo  por llegar a un conceso nacional para la escogencia de un candidato único a la presidencia de la República en las elecciones de 2018, que concite la unidad en torno al desarrollo y cumplimiento de los Acuerdo de Paz. A la vez, en esta reunión también se comenzarán los escarceos en busca de alianzas para integrar fuerzas que permitan la escogencias de candidatos para la gobernación y alcaldías como protagonistas de primera línea.

Esta reunión del hotel Ambalá, girará en torno a una declaración política, cuyo borrador inicial pudo conocer este portal y que hace un análisis de los cambios que vendrán en el desarrollo de los acuerdos de paz y el compromiso de de las diversas fuerzas sociales, políticas y democráticas de Colombia en las transformaciones estructurales que necesita el país.

El texto completo del borrador inicial del documento denominado:"Paz, Convergencia y Territorio", que se constituye en el llamamiento a construir una gran convergencia política y social en el Tolima, es el siguiente:  

"Los efectos que ha producido la firma de los acuerdos de Paz de La Habana, la refrendación, las zonas de concentración y en especial la dejación de armas, siguen produciendo encontradas reacciones en los partidos políticos, en la sociedad civil y en los medios y opinión pública. 

Indudablemente, estamos ante un quiebre histórico que pone fin a un largo y degradado conflicto armado en Colombia que ha producido no solo millones de víctimas y una pobreza desbordante, sino un régimen político cerrado y excluyente, ejercido monopólicamente por una elite que se niega a ceder poder político y económico, poder construido sobre el miedo, el terror, el destierro, la amenaza, el asesinato, la desaparición forzada y un sistema corrupto y clientelar de vastas proporciones.

El movimiento alternativo, se ha jugado por estos cambios y en sus distintas y plurales vertientes, expresan este anhelo de cambio social represado, la defensa del proceso de paz, el apoyo a su efectiva implementación, y el propósito de construir una Colombia incluyente, en paz, democracia y justicia social, ganando espacios de intervención social y política en el concierto nacional.

En el debate público difundido por los medios masivos se pretende dar por finalizado la cuestión de la paz y posicionar a través de noticias escandalosasel fenómeno de la corrupción, como el principal problema nacional. El dilema que nos proponen y seguido por varios sectores que se presentan con candidaturas novedosas, es el de paz o corrupción, de paz o cambio social.

La hora presente nos impone construir colectivamente un proyecto nacional centrado en la paz el cambio, la justicia social y una acción colectiva contra la corrupción, que aclimate la convivencia pacífica, la controversia civilizada y el tramite a los proyectos de reforma que requiere el régimen político y el modelo económico,  proyecto nacional colectivo que impulse un modelo económico de justicia social y una democracia política vigorosa. Este propósitocruza por plantear la construcción de una gran convergencia, social y política que frene la tentativa de la ultraderecha de romper y hacer trizas los acuerdos alcanzados.

Ante las ya coaliciones que se anuncian en contra de los procesos de paz, es deber de todos los demócratas impulsar una convergencia que erradique la odiosa y pérfida actitud de la oligarquía colombiana de incumplir y romper los acuerdos.En esta dirección, llamamos a todas las expresiones políticas alternativas para que nos encontremos, intercambiemos opiniones y propuestas y construyamos una fuerte convergencia, que desde el Tolima sirva de experiencia positiva a replicar en todo el país.

La convergencia democrática y alternativa, no es un mero propósito electoral a corto plazo: es una necesidad histórica para cerrar definitivamente el ambiente de guerra y de exclusión y construir un futuro con justicia social. Este llamamiento a construir una gran convergencia, coalición por la paz o pacto ciudadano por la paz, el cambio y la justicia social, convoca a:

• Los partidos y movimientos alternativos
• Las fuerzas sociales y culturales amantes de la pluralidad, la diversidad, la convivencia pacífica
• Fuerzas del establecimiento y sus partidos que se jugaron y siguen apoyando el proceso de paz
• Al empresariado dispuesto a generar una economía distinta, competitiva y generadora de empleo dispuesta a abrir espacios de reincorporación social
• La academia que trabaja por  la memoria histórica en procura de renovadas sintonías con la región,
• Los movimientos sociales que anhelan un ambiente más propicio y legitimo para tramitar sus demandas,
• Toda persona que quiera construir un Tolima y una Colombia en paz, democracia, justicia social, inclusión y bienestar, como un legado cierto para nuestra niñez y juventud.

Para el caso del Tolima, la actitud poco comprometida con la región de parte de la mayoría de la bancada Tolimense en el Congreso de la Republica, percepción ciudadana que siente que se han dedicado más a engrosar la burocracia que a tramitar proyectos de desarrollo territorial y de control político, percepción que siente que el abandono y el desinterés unido al silencio frente a casos emblemáticos de corrupción y cambios en las fuentes de recursos para la región, hanpuesto al descubierto un deseo y anhelo por rescatar la voz regional en el Congreso y encontrarle salidas de consenso y convergencia, entre otros a los siguientes problemas:

• El desinterés por impulsar una agenda territorial de paz que logre posicionar proyectos estratégicos tanto para el departamento como para los municipios afectados por el conflicto armado empezando por los municipios con presencia de zonas Veredales y por adoptar un vigoroso sistema de participación ciudadana, que hagan del Tolima un territorio de paz y una región con vocación de progreso y bienestar.
• El desmantelamiento  del patrimonio Tolimense, el abandono vial de la malla terciaria y la cínicaactitud de protecciónde autoridades judiciales ante la corrupción desbordada ejercida por las castas que han ostentado el poder departamental y municipal
• El pobre debate y control político de dichos representantes en especial en sus posturas lánguidas y contrarias al clamor nacional por los acuerdos de paz, su doble moral ante la protección del ambiente y del agua
• La grave situación que atraviesa los sectores de salud y educación por los cambios producidos al sistema general de participaciones, reforma que se votó con el apoyo de la mayoría de la bancada parlamentaria del Tolima.

• El abandono al que está sometido el campo tolimense en especial los pequeños productores de alimentos  por efectos del cambio climático (veranos e inviernos descontrolados), la errática política agropecuaria y la   escasa presencia del gobierno departamental en  apoyo al sector.
• El riesgo al cual están sometidas las fuentes de agua del departamento por la presión de los títulos mineros que copan más del 70% del territorio tolimense y ponen en peligro nuestro parque natural los nevados que representa más del 25% del total de nevados a nivel nacional,
• La  escasa acción de las entidades de control frente a los casos graves de corrupción denunciados y al desarrollo de obras pomposas que presentan atrasos y despilfarros como el túnel de la Línea, el Triángulo del Sur y la doble calzada Melgar-Ibagué- Cajamarca". (sic)