El alcalde de Ibagué, Andrés Hurtado, dejó ver el disgusto que le produjo el encuentro de la alcaldesa electa Johana Aranda con la gobernadora electa del Tolima, Adriana Magali Matiz. 

Ambas mandatarias se reunieron un día después de ganar las elecciones, como gesto de cortesía y demostración de disposición para trabajar juntas. Sin embargo, el encuentro no le gustó al jefe político de la alcaldesa Aranda. 

En la emisora Ondas de Ibagué, Hurtado le envió un mensaje contundente a su pupila: debe guardar las distancias con la gobernadora que representa al 'barretismo'. 

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"Me parece excelente el manejo que dio Johana Aranda a su relación con la gobernadora electa, Adriana Magali Matiz. Pero le sugerí que: 'Cada loro en su estaca', porque la responsabilidad y manejo de Ibagué está en manos únicamente del mandatario local, no de nadie más", señaló Hurtado. 

En ese sentido, Hurtado lanzó duros dardos contra su viejo amigo, el gobernador Ricardo Orozco, a quien antes le agradecía sus inversiones en Ibagué y ahora critica.

"Muchos alcaldes dicen que pasaron cuatro y hasta ocho años sin que llegue allí un solo metro cúbico de concreto a sus vías y tiene la gobernadora que saldar una deuda de ocho o doce años de ausencias de mandatos en varios municipios en el Tolima, que aún no han visto respuesta a sus necesidades", esgrimió el alcalde. 

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De esta manera, queda claro el panorama político en el Tolima: el 'barretismo' buscará seguir como organización hegemónica y el alcalde Hurtado junto a sus aliados tratará de destronarlos. En los próximos años se verá un choque de trenes entre estas organizaciones políticas.