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Desconcierto en el sector político tradicional por formula Vicepresidencial de FICO

Desconcierto en el sector político tradicional por formula Vicepresidencial de FICO

Días antes de haber sido seleccionado como fórmula presidencial de Federico Gutiérrez (Fico), Rodrigo Lara Sánchez había escrito un tuit llenando de elogios al candidato de la Centro Esperanza Sergio Fajardo, donde señalaba que hacía 15 años lo conocía y destacó su labor como alcalde de Medellín y gobernador de Antioquia, y agregó que: “creo firmemente en su capacidad de gobernar”, aludiendo tácitamente a su candidatura presidencial.

Lo cierto es que Lara Sánchez, independientemente que haya sido bueno, regular o mal alcalde de Neiva, según los críticos y analistas políticos, no representa ninguna fuerza política en su departamento (el Huila o su capital), tampoco una etnia determinada, movimiento social o agrupación que sume votos a la candidatura que apoya el establecimiento.

Por el contrario, esta escogencia por parte de Fico, le ha granjeado críticas en algunos sectores de la política tradicional que lo apoyan, pues no escogió a una mujer, cuya representación llega al 53% del potencial electoral del país, tampoco se tuvo en cuenta a la costa Caribe ni a la Pacífica, ni a ninguna región especial de la nación.

En cambio, sí dejó por fuera a los partidos que los apoyan. Sobre el tema consultado un avezado consultor y analista político por este portal indico: “No hay duda. Dejaron a liberales, conservadores, la U, el CD y Cambio Radical de pasajeros del último vagón del tren”.

Además de ser el hijo no reconocido por un exministro asesinado por la mafia (Rodrigo Lara Bonilla), a Lara Sánchez, no se le conoce ninguna actividad política ni lucha social que lo enmarquen en el radar de un moviente que permita su reconocimiento como líder de algo.

Esta escogencia de Fico Gutiérrez, como su fórmula vicepresidencial, se puede considerar como una comedia más de equivocaciones políticas elementales, que solo favorece la avanzada electoral de Petro y los demás candidatos, y de la protesta social contra el continuismo de lo tradicional, y el poder para los mismos que han   gobernado los últimos 20 años. Los mismos con las mismas, para lo mismo, dice la gente común.

Como si la pobreza, la exclusión, la desigualdad, la concentración de la riqueza, y las inconformidades crecientes no existieran. Ceguera histórica irresponsable, por decir lo menos.

Oscuro, complejo, incierto el panorama de Fico, con un triunfalismo insensato, que se niega a ver el monstruo que tiene delante, actuando como si estuviera en la arcadia feliz de los inicios del viejo Frente Nacional, ignorando lo social y, sin ideas fuerza, ni programas seductores, que atraigan a la juventud y al pueblo raso. Sin propuestas claras y atractivas que convoquen y entusiasmen a la mayoría ciudadanía, que en la elección presidencial no manejan a su antojo las maquinarias, la burocracia y el dinero.

Se requieren imaginación e inteligencia, para romper el inquietante cerco de los 18 millones de abstencionistas. 

La estrategia parece ser la de seguir inmersos fatalmente, en la insensatez de la mecánica, y la sumatoria electorera de partidos en decadencia, fábricas de avales y grupúsculos oportunistas caminando vendados al abismo.

 Ni reformismo democrático, ni búsqueda de una Colombia igualitaria y progresista, ni la solución a los temas cruciales de justicia, centralismo, salud deficiente, educación precaria y costosa, vivienda, y créditos deficientes.

El imperativo de un nuevo orden territorial para la unidad nacional, desvertebrada y amenazada, la desigual tenencia de la tierra, la aberrante concentración de la riqueza, reflejada, también en la propiedad excluyente de los medios de información.

¿Dónde está el planteamiento para la reforma, imprescindible del Congreso? para no abordar sino algunos de los tantos conflictos institucionales, económicos y sociales que acosan a la sociedad violenta e inequitativa que sufrimos los colombianos, donde reinan la inseguridad y la amenaza permanente contra la libertad, y el derecho a la vida. 

Vastas regiones poseídas por el narcotráfico y los grupos por fuera de la ley, donde la autoridad y el estado no existen. 

La Colombia Real que no quieren ver ni tienen fórmulas para superar ni redimir. La guerra que no logro acabar el significativo esfuerzo del Acuerdo de la Habana con las Farc. Luego de este es evidente la multiplicación de los grupos violentos, los que van contra un anhelo colectivo de paz estable, sólida y duradera.

En los diferentes sectores de la política tradicional y corrupta que apoyan a Fico, que sonriera que su compañía vicepresidencial no tiene nada de atractivo y, por el contrario, desconoce a sus propios aliados. 

Y para concluir esta situación la revista Semana señala que, según medición norteamericana, “Casa Apuestas”, hoy el dato sobre probabilidad de llegar a la presidencia de Colombia es: PETRO 57%-FICO 40%.

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