Un total de 750 mil contratos de Colombia Compra Eficiente ubicados a través del Sistema de Contratación Pública, Secop I y Secop II fueron analizados por el Instituto Anticorrupción llegando a la conclusión que en los primeros 70 días se firmaron 29.126 contratos quedando en manos de cerca de 9.500 empresas solamente.  

Lo grave del asunto está en la contratación de organizaciones que hacen de todo sin saber de nada.

 Ejemplo, empresas de turismo que se dedican a hacer auditorías de comunicación y redes. 

De acuerdo a Camilo Enciso, director ejecutivo de esa organización “Contratar con organizaciones multipropósito, especialmente las pequeñas, eleva los riesgos de corrupción enormemente.

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 Cuando se contrata a una empresa o fundación que un día construye hospitales, al día siguiente vende respiradores y al siguiente provee kits de alimentación escolar, la probabilidad de que dicho contratista no sea idóneo para cumplir los contratos se dispara. Es como querer ser médico, diseñador de modas, arquitecto, ingeniero aeroespacial y futbolista a la vez. Eso no sale bien”.

Pero volvamos al estudio. Un alto porcentaje de esas empresas multipropósito contrataron por primera vez en sectores en lo que nunca habían participado y que aprovechando el contexto de la urgencia manifiesta aprovecharon las directrices del gobierno nacional, encontrado que 2.800 empresas multipropósito beneficiarias no cumplían con los requisitos de ley, experiencia y capacidad. 

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La caja de Pandora en el estudio está en que el 51% de los contratos adjudicados en estos 70 días fueron otorgados a régimenes especiales de contratación. Es una caja negra muy grande, porque se desconoce la modalidad de contratación que se usó y cómo se seleccionaron los contratistas. Lo que no permite sacar conclusiones de si realmente sirvieron para mitigar y atender la pandemia”

El Instituto Anticorrupción al final del informe presentó un protocolo a utilizar para conocer más sobre el Indice de Contratista Multipropósito, indicador que permite reconstruir la historia de los contratistas.  “La propuesta es que sirva para que las entidades tengan información previa de los proveedores, conocer su historial como contratista y saber qué tipo de bienes y servicios ofrecen hoy en día.

 Asimismo, ayudaría a los organismos de control y oficinas de control interno que realizan auditorías para priorizar los contratos que puedan tener mayores alertas de posibles irregularidades”. 

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Para Adriana Romero, líder de la investigación En La Guajira, Chocó, Bolívar, Amazonas, Putumayo y Vichada, se registraron el mayor número de casos donde entre el 60 % y 50 % de los contratistas son multipropósito”

El llamado para los alcaldes está en revisar con lupa los oferentes. Recordaron que “Las organizaciones multipropósito, que abarcan todo tipo de actividades, licitan en todo tipo de procesos, independientemente del conocimiento específico requerido por parte de la entidad (el know how), con el objetivo de conseguir el mayor número de contratos.

 La falta de especialización pone en peligro el gasto público y la capacidad del Estado”.

 “Con este análisis ayudamos a ponerle un bozal a la jauría de la corrupción. “El uso recurrente de organizaciones multipropósito para robar recursos públicos se hará más difícil, gracias a que podremos priorizar la vigilancia de los contratos con las empresas y fundaciones que revisten mayor riesgo por su falta de idoneidad”, puntualizó Camilo Enciso.