Cada vez son más frecuentes los casos de conjuntos residenciales en Ibagué que no cuentan con buen servicio de agua potable. Bien conocidas son las denuncias de los habitantes de Arboleda Campestre, Alminar Samoa, Altos de Berlín, por nombrar algunos. 

¿Quién responde por esta problemática? El alcalde Andrés Hurtado responsabilizó a la administración de Guillermo Alfonso Jaramillo, por la manera "irresponsable" de otorgar disponibilidades en sectores donde no se podía garantizar el servicio continuo de agua potable. 

"El anterior gobierno entregó disponibilidades para alrededor de 45.000 nuevas viviendas en la ciudad de Ibagué. Eso es casi que la mitad Ibagué, con casi que 100.000 o 200.000 habitantes. Así es que entregaron disponibilidades de manera irresponsable", indicó Hurtado. 

En ese sentido, el alcalde se refirió al caso de la Arboleda Campestre, conjunto residencial en el que sus habitantes se han visto obligados, incluso, a cocinar con el agua de las piscinas. 

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"Son casi 20.000 habitantes, es como otro nuevo municipio al interior de Ibagué, con la misma agua de hace 50 años; con un río Combeima que bajó de 8.500 litros por segundo, alrededor de 2.500 litros por segundo", explicó. 

El otro caso que ha generado polémica es el de Alminar Samoa. Allí en la comuna Seis los compradores culpan a la Constructora JF por venderles los apartamentos sin garantías de poder suministrar agua potable. 

"Un acueducto que entregó de manera irresponsable una disponibilidad y después cuando entra mi gobierno nos empiezan a llegar las demandas. Incluso hubo un fallo que ordenaba mi arresto por algo que yo no entregué. Todo eso se debe a la irresponsabilidad con la que ha sido maneja la empresa (IBAL) en años anteriores", enfatizó. 

El alcalde Hurtado señaló que las principales falencias se encuentran en la comuna Nueve, o la también denominada zona de expansión. Para corregir esto asegura que dio órdenes de negar las solicitudes de disponibilidad en sectores donde no se puede garantizar agua potable de manera continua. 

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Además, hizo un llamado a los ibaguereños para que verifiquen los sectores donde piensan invertir en la compra de sus viviendas. "Después que hacen sus inversiones se entablan las demandas, después de que ya están viviendo allí, en contra del constructor, de la administración, y se libran todo tipo de órdenes por parte de los que administran la justicia para que uno cumpla lo que otros entregaron", agregó.

¿La solución? La misma de siempre, el Acueducto Complementario, promesa por más de 20 años en Ibagué. La mayor medida para esta problemática sería construir y poner definitivamente en funcionamiento el denominado 'tanque de la Fiscalía'. 

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"Estaré en el Ministerio de Vivienda para un proyecto por $14.000 millones que significan que esa línea que va del IBAL al tanque sur, podamos conectarla con el nuevo tanque de la Fiscalía; así podremos solucionar de manera definitiva el problema de toda la comuna Nueve y parte de la comuna Ocho, especialmente la Ciudadela Simón Bolívar", concluyó.