Los habitantes del conjunto residencial Alminar Samoa, ubicado en la comuna Seis de Ibagué, se encuentran desesperados por la problemática relacionada al servicio de agua potable. Ni un fallo de la Corte Constitucional ni las advertencias de la Contraloría General, han servido para que  Construcciones JF y el acueducto comunitario El Triunfo, tomen acciones para mejorar la calidad del líquido que brindan a cerca de 2.000 familias.

La gota que rebasó el vaso fueron los cinco días de la semana anterior, que duraron sin recibir agua a través del sistema de acueducto. La indignación de los residentes de Alminar Samoa aumentó al verse obligados a trasportar el agua en recipientes hasta sus viviendas.

Jair Garzón es habitante de Alminar Samoa desde hace dos años, quien compró un apartamento sin que le informaran de la mala calidad del agua que recibiría. “Las pruebas han evidenciado que el agua no es apta para el consumo humano, y esa ha sido la inconformidad estos años. Nosotros pedimos acciones concretas y que se respete la sentencia a una tutela, que busca mejorar la calidad del agua que recibimos. Pero la constructora solo da respuestas triviales”, contó.

El punto donde el acueducto El Triunfo capta el agua, es uno de los mayores temores de la comunidad de Alminar Samoa. “Se ha demostrado que por allí pasan animales y hasta llega gente a bañarse; después eso lo recibimos nosotros, nuestros niños y adultos mayores”, apuntó Jair.

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Más allá de la Constructora JF y el acueducto comunitario, los residentes del conjunto residencial también reprochan las licencias que entregó en su momento la Curaduría Urbana. “Uno de los responsables es la Curaduría Urbana, por dar el permiso, ¿Cómo una Curaduría permite construir donde no hay agua potable?”, cuestiona Jair.

De acuerdo con la comunidad, la mala calidad de lagua ha provocado afectaciones en la salud de algunos residentes. “Dentro del conjunto se han identificado tres casos: un adulto de la tercera edad con problemas de salud y hay otros dos niños con problemas de diarrea y vómito. Obviamente no hay un examen  que diga que es por el agua, pero eso se sabe”, enfatizó.

A la problemática por la mala calidad del agua, la semana anterior se sumó la ausencia del líquido vital durante cinco días. Los habitantes de Alminar Samoa se vieron obligados a recibir el agua en carrotanques y llevarle en baldes hasta sus apartamentos.

“Ver a los adultos mayores haciendo fila para cargar el agua, eso generó más rabia. Ver un anciano levantando un balde el cual no puede ni alzar, eso es algo indigno y la gente se molestó mucho más. Ahora la excusa es decir que esto es por el invierno, cuando no es así, es un tema como una bola de nieve que viene creciendo”, criticó Jair Garzón.

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“Nosotros a los 60 años de edad no podemos ponernos a cargar baldes de agua, nuestro cuerpo no nos da. El señor Jorge Fajardo nos prometió vivienda digna, pero esto de digna no tiene nada. ¿Sin agua potable qué hacemos, que es lo más mínimo?”, expresó Martha, otra habitante de Alminar Samoa.

Otra noticia que generó malestar entre la comunidad, fue la construcción de una quinta torre en Alminar Samoa, pese a la falta de agua potable. En ese sentido, la comunidad de Alminar Samoa decidió convocar a una protesta el próximo viernes 2 de julio. “Queremos hacer bulla, vamos a protestar porque no pueden seguir vendiendo la torre cinco con la misma problemática. Esto va a colapsar, habrá un caos terrible”, señaló Jair.

A partir de las 11:00 de la mañana iniciará un plantón frente a la portería de Alminar Samoa. Se espera que después inicien una manifestación hasta la calle 60.