El nombre del concejal Correa se suma al de Camilo Delgado quien al igual que Correa participó como candidato a la Alcaldía de Ibagué en el 2019 y apoya también la candidatura presidencial de Petro.

Todo apunta que tanto Correa como Delgado volverán a intentar ser alcaldes de Ibagué en las elecciones de octubre de 2023. El otro excandidato a la Alcaldía de Ibagué en 2019 que también acompaña la aspiración de Petro, es el exdirector de la Aeronáutica Civil, Alfredo Bocanegra, sin embargo aún no hay la certeza de que quiera repetir candidatura al primer cargo de Ibagué.

Dentro de los llamados ‘alternativos’, aparece Renzo García como la carta que se jugarán sectores independientes. El nombre del diputado García fue propuesto como candidato a la alcaldía de Ibagué en un homenaje que se le hizo a la representante electa por el Pacto Histórico Martha Alfonso.

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Con tres o cuatro posibles nombres como candidatos a la alcaldía de Ibagué para el próximo año y que hoy coinciden en que apoyan la candidatura presidencial de Gustavo Petro, hay quienes piensan que la oportunidad de triunfo la tendrían si se ponen de acuerdo y se selecciona un solo candidato.

Sobre el papel suena interesante el planteamiento, pero cómo ponerse de acuerdo para escoger ese candidato, es la pregunta que empiezan a formularse en algunos círculos políticos, sobre todo que estén dispuestos a vencer egos e individualidades.

Candidato del barretismo

Para nadie es un secreto que si no hay acuerdo y todos quieren ir por separado, las posibilidades de triunfo serían menores, más cuando el barretismo al parecer ya tendría definido el nombre del actual secretario de Salud del Tolima, Jorge Bolívar como el candidato por esta agrupación política, aun cuando no se descartaría que el nombre del actual gerente de Indeportes, Alexander Castro podría estar en la carpeta de posibles candidatos.

El único nombre que ya oficializó el barretismo es el de la actual representante a la Cámara, Adriana Magaly Matiz como candidata a la gobernación del Tolima, elección que de acuerdo con el escenario que hoy se avizora, indica que las probabilidades de triunfo son altas.

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Matiz tiene la ventaja que hará la campaña sobre un gobierno departamental que hasta hoy ha cumplido una gestión meritoria donde se destaca lo alcanzado en salud, además de la responsabilidad con que ha asumido el conjunto del trabajo, contrario a lo que ocurre con la Alcaldía de Ibagué, donde los escándalos, la falta de compromiso y planeación han sido la constante en el gobierno de Andrés Hurtado, situación que deja maltrecho al barretismo, que al día de hoy aún no toma una decisión oficial de si rompe o continúa brindándole apoyo a uno de los alcaldes más cuestionados e inoperantes en la historia de Ibagué.

Ante el panorama que presenta Ibagué en la actualidad, es claro que un candidato a la alcaldía que resulte de la confluencia de los sectores tradicionales, en este caso liberalismo y conservatismo independiente (Delgado-Bocanegra) más los partidos alternativos, (Renzo-Correa) podría propiciar en el 2023 una campaña sugestiva.