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¿El salario mínimo es justo y necesario?
¿Para qué alcanza el salario mínimo?
$1.014.980 pesos
Transporte una persona 4 veces al día $160.000 mil pesos al mes.
Arriendo mensual un apartamento pequeño en estrato 2 $500 000 mil pesos.
Servicios públicos, durante un mes, Luz 50.000, Agua 40.000, Gas 40.000, Datos y entretenimiento 60.000
Mercado para 3 personas $400.000.
Total 1.250.000,
No alcanza para estas necesidades básicas y mucho menos para vestuario, salud y recreación.
Si esta realidad la cruzamos con los indicadores del mercado laboral para la Ciudad de Ibagué, emitidos por el DANE, en octubre de 2020, los cuales nos indican que en la capital del Tolima, solo hay 206.000 personas ocupadas, de las cuales el 52 % son informales y el 38% trabajan por cuenta propia es decir los individuos pertenecientes a estos dos grupos se ganan menos del salario mínimo y a esta fecha 62.000 personas están desempleadas con sus correspondientes núcleos familiares que se ven afectados por este fenómeno.
Además que existen 182.000 ibaguereños inactivos que están en condiciones de aportar su trabajo a la sociedad, pero que perdieron toda esperanza de conseguirlo.
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Lo anterior, nos demuestra que lo que estamos viviendo en Ibagué es una catástrofe económica y social de la cual nadie se quiere responsabilizar.
El Alcalde de Ibagué, Andrés Fabián Hurtado, no tiene una clara propuesta que buscar resolver el problema de empleo, en una ciudad con los más altos índices de desocupación en Colombia.
Hurtado, habla de las mega obras, para el Gobernador, Ricardo Orozco, solo realiza unos pocos paños de agua tibia con inversiones muy bajas y el gran porcentaje de los recursos los destina a pavimento y cemento y el Gobierno Nacional se gasta una gran porción del presupuesto para ayudar a los monopolios y a los grandes conglomerados.
En fin todos nuestros gobernantes ignoran la pobreza extrema, los desempleados, las pequeñas y medianas empresas informales que son la mayoría de Ibagué, el Tolima y Colombia.
Como propósito de año nuevo llamo a estas mayorías olvidadas por las políticas estatales a movilizarnos, para exigir un salario mínimo que cubra el incremento real del costo de vida y todas las necesidades básicas de las familias, un ingreso solidario para la pobreza extrema, que ayude a que los Colombianos olvidados y que tengan su mínimo vital.
Igualmente, que las pequeñas empresas tengan una ayuda económica para reactivarse; por eso exigimos que todos pongan, como la pirinola, los grandes monopolios, los Gobierno Nacional, Departamental y Municipal, sólo así podremos evitar una descomposición social sin precedentes con sus consecuencias ligadas a la inseguridad y la violencia.
* Diputado Asamblea del Tolima
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