Una reciente encuesta del Departamento Administrativo Nacional de Estadística (Dane), evidencia que disminuyó la proporción de colombianos dispuestos a vacunarse contra el covid-19. En septiembre el 62,5% de los encuestados estaban en disposición de aplicarse la vacuna, y en octubre bajó al 57, 5%.

La encuesta también revela que los hombres se encuentran más confiados en la futura vacuna. El 61,1% de encuestados respondieron que sí se la aplicarían, y el 38,9% que no. Entretanto, el 55,3 de las mujeres expresaron que no se aplicarían la vacuna. 

En cuanto a Ibagué, la encuesta indica que un alto porcentaje de ciudadanos se niegan a aplicarse la vacuna contra el covid-19. De acuerdo con el Dane, el 45% de los ibaguereños respondieron que no se la aplicarían, y el 55% contestaron que sí. 

El estudio evidencia que la capital del Tolima se encuentra entre las tres ciudades del país con menor aceptación a la vacuna. La primera es Cali, con el 52,6% de encuentados que respondieron que no se la aplicarían, la segunda es Ibagué y la tercera es Pereira, con el 44,4% de encuestados que la rechazan. 

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De otro lado, las ciudades con mayor aceptación a la vacuna, son Santa Marta con el 81% de encuentados que respondieron que sí se la aplicarían, Quibdó con el 74,9% y Tunja con el 73,3% de aprobación. 

En referencia a otras ciudades cercanas a Ibagué, se cuentran Neiva con el 67,9% de aprobación a la vacuna, Armenia con el 61,8% y Manizales con el 68,8%. Es decir, niveles de aceptación a la vacuna muy superiores a los de la capital tolimense. 

En Bogotá, el sondeo señala que el 66,3 de los encuestados sí se vacunarían contra el covid-19, mientras que, el 33,7% contestaron que no.

Vale la pena mencionar que, el Ministerio de Salud tiene planeado adquirir las primeras vacunas en el transcurso del primer semestre del año 2021. En sus pronósticos, los primeros vacunados serían los trabajadores de la salud, que son unas 800.000 personas; los adultos mayores de 60 años, que ascienden a 6,8 millones de personas; y el resto se distribuirían entre la población con comorbilidades como hipertensión, diabetes, enfermedades cardíacas y con deficiencias renales, que son cerca de 6,4 millones de habitantes.