Este domingo 29 de octubre, los ibaguereños tendremos la oportunidad de cambiar el estilo de gobierno de las mentiras y los engaños que se ha tomado a la ciudad.

No podemos permitir que el continuismo acabe por llevarnos, nuevamente, a oscuras etapas que considerábamos ya superadas, donde el alcalde de turno dejaba a su sucesor para que le tapara sus delitos y continuara desfalcando el tesoro público.

La democracia, aunque débil e imperfecta, nos da la oportunidad de impulsar los cambios que necesita Ibagué a través de las urnas. Por eso, esta oportunidad no la debemos desaprovechar para echar a la calle al balandrón que tenemos como alcalde; además, no permitirle que nos deje su sucesora para seguir la senda del desgobierno, la ineptitud, la inoperancia y la corrupción, entre otros males.

La intervención descarada del alcalde Andrés Hurtado, en el proceso electoral apoyando a su candidata Johana Aranda, con recursos de la administración a través de empleados, contratistas, parque automotor, promesas de obras para los barrios populares y chantaje con los programas para la población vulnerable como el PAE, son un delito electoral pendiente de investigación. En este orden, también hacen cola ante las autoridades electorales como organismos de control del Estado, el esclarecimiento de las millonarias sumas de dinero que “corrieron como ríos”, en la campaña de la señora ungida por el Alcalde.

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Esto fue un ataque y un hostigamiento al proceso electoral orquestado por el mandatario local que caldeó el ambiente, causando temor, incertidumbre y frustración, así como lo denunciaron los demás candidatos a la Alcaldía de Ibagué, como Jorge Bolívar, Ricardo Ferro, Marco Hincapié, José Barreto y Renzo García, entre otros.

Debido a estas circunstancias, hoy más que nunca, se requiere que todos los electores aporten su responsabilidad, serenidad y mucho juicio a la hora de votar. Esta acción no debe estar maniatada a dádivas ni al corrupto dinero que ofrecen los mercaderes del voto; esto no es progreso ni desarrollo para el municipio, todo lo contrario, trae más miseria y frustración para sus habitantes. Razón tenía el maestro Calos Gaviria Díaz, “Quien paga para llegar, llega para robar”.

Pedimos que los ciudadanos voten consciente y responsablemente. Para ello, deben buscar candidatos a la gobernación, alcaldías, Asamblea y concejos municipales, que sean personas equilibradas, inteligentes, preparadas, honestas, auténticas, pragmáticas, si se quiere, y bien intencionadas.

A estos requisitos se le debe agregar, que demuestren con hechos el amor y sentido de pertenencia a su tierra, que tengan capacidad de liderazgo, de diálogo y de asertividad; que conozcan a ciencia cierta las necesidades del territorio que quieren gobernar. En el caso de Ibagué, es el voto consciente y responsable el que se necesita para sacar a nuestra querida y amada ciudad del lodazal donde se encuentra.

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En estas condiciones, apelamos a la juventud, estudiantes, empleados, trabajadores y todos los ciudadanos que no se encuentren contaminados de la politiquería tradicional para elegir unos buenos gobernantes, una buena Asamblea y unos buenos concejos.

No somos inocentes ni ingenuos, mucho menos desconocemos las dificultades que tenemos para elegir en Ibagué y los demás municipios del Tolima personas de estas características. Los riesgos de la intoxicación a la hora de la votación son palpables, son reales; aún no podemos contar con un voto depurado, con un verdadero voto de opinión, pero al menos en Ibagué, desde la elección de Guillermo Alfonso Jaramillo a la Alcaldía, hay avances, hay atisbos, hay esperanza de electorales que no venden ni entregan su conciencia por un sancocho o un tamal.

Debemos reconocer el trabajo fundamental que han desarrollado las redes sociales y los medios alternativos de la web en la democratización de la información, para brindarle al ciudadano y elector un panorama distinto del que hoy ofrecen algunos de los medios tradicionales cooptados por la pauta oficial de la alcaldía de Hurtado y el dinero de la campaña de la señora que aspira a sucederlo.

Hay más candidatos y buenos, usted puede escoger otro que no represente el continuismo y fétido establecimiento del sibilino Hurtado.  

Hacemos una invitación comedida a todos los electores a ejercer el derecho al voto en forma consciente y responsable, alejados de los perversos ofrecimientos y canonjías, y que lo hagan pensando solo en el engrandecimiento de la ciudad y el departamento.