El pasado 16 de septiembre se llevó a cabo una asamblea extraordinaria de accionistas del Terminal de Transportes de Ibagué. El Cronista.co accedió al acta de dicha asamblea, en la cual se discutió principalmente la compra del 62 % de las acciones del Terminal de Transportes de Popayán.

Durante el espacio el gerente Heber Acosta propuso a los accionistas presentes, que se utilicen recursos del Terminal de Transportes de Ibagué, para participar en el proceso público de enajenación que adelanta el Instituto de Financiamiento, Promoción y Desarrollo de Tuluá (Infituluá), y así comprar 14.731.914 acciones del Terminal de Popayán.

De acuerdo con lo que argumentó el gerente Acosta, la compra de este importante paquete de acciones, le otorgaría al Terminal de Ibagué el control administrativo del Terminal de Popayán. Además, les daría ingresos anuales superiores a los $ 1.000 millones.

Algo similar sucede con el Terminal de Ibagué, el cual pertenece mayoritariamente al Terminal de Girardot  y empresas de Huila y Caquetá, pues cuentan con el 60 % de las acciones.

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El Cronista.co dialogó con un accionista minoritario del Terminal de Transportes de Ibagué, quien pidió reserva de su identidad. Él reconoce el buen negocio que será la inversión en el Terminal de Popayán, sin embargo, le preocupa que esto postergue todavía más la construcción del nuevo Terminal de Ibagué, planteado desde hace ocho años.

“Es innegable que eso será un gran negocio. Será comprar más de la mitad de acciones del Terminal de Popayán, que obviamente va a arrojar grandes ganancias a futuro. Pero por más que quieran hacer ver que no, eso va a afectar el proyecto del nuevo Terminal de Ibagué”, dijo.

Según la exposición del gerente Acosta, la inversión en el Terminal de Popayán sería de $ 12.982 millones. De los cuales, $ 4.982 millones serían de ahorros por operación y los restantes $ 8.000 millones se obtendrían a través de un crédito bancario a cinco años.

En ese sentido, la gerencia aseguró que esta inversión no afectará los recursos de capitalización destinados para el proyecto de la nueva sede del Terminal de Ibagué.

“Estos recursos se encuentran reservados para el proyecto que se adelanta de la nueva Terminal y que actualmente se encuentra suspendido debido al hecho sobreviniente de la implementación del Sistema Estratégico de Transporte Público (SETP) para la ciudad de Ibagué”, indicó el gerente.

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Asimismo, el gerente Acosta señaló que en un plazo de cinco años estaría listo el nuevo Terminal de Ibagué. No obstante, hubo accionistas que se opusieron a la propuesta de inversión en el de Popayán y expresaron que se debía priorizar la reubicación del Terminal de Ibagué. Entre ellos, el gerente de Velotax, Rodrigo Aguilar y la directora de Cortolima Olga Lucía Alfonso.

Finalmente, el 70,69 % de los accionistas presentes votaron a favor de invertir en el Terminal de Popayán; el 1,18 % votó negativo; el 11,69 % en blanco; y el 16,44 % se abstuvo de votar. De esa manera, quedó aprobada la inversión.

“Se debería pensar primero en el progreso regional, en el progreso de Ibagué; por eso debería ser prioritaria la nueva sede del Terminal. Además, se necesita, el actual terminal hace rato le quedo pequeño a Ibagué y fuera de eso es obsoleto. Pero aquí nos falta mayor gestión y mucha voluntad política para hacer progresar a Ibagué”, manifestó el accionista consultado.

El Cronista.co trató de comunicarse con el gerente Heber Acosta para aclarar algunos puntos relacionados a la inversión en el Terminal de Popayán, pero no fue posible obtener una respuesta suya.