El exdiputado a la Asamblea del Tolima y conocido dirigente del partido comunista, Raúl Rojas, se encuentra internado en la clínica Mederic de Bogotá, a consecuencia de dificultades respiratorias ocasionadas por el Covid.19. 

El “Camarada Raulito”, como se le conoce amigablemente, es natural de Chaparral, y toda su vida la ha dedicado a las luchas populares por las reivindicaciones de los trabajadores y sectores vulnerables de la sociedad.

Fue diputado a la Asamblea del Tolima, por los movimientos alternativos, dirigente sindical agrario y ha ocupado diversos cargos de dirección en el partido comunista del Tolima. Por su lucha consecuente, también ha sufrido persecuciones políticas que en más de una ocasión lo llevaron a la cárcel, encierros que no mellaron su conciencia ni su capacidad de lucha.   

En una nota que nos hizo llegar el ex congresista Jairo Rivera Morales, dice: “Raúl ha sido un combatiente de todas las horas por la causa popular y por la consolidación de los derechos de los trabajadores. Comprometido y abnegado en el empeño de ver realizadas las aspiraciones de su colectividad política. Dirigente agrarista del sur de mi departamento y del Tolima todo. Entregado desde el alma hasta los tuétanos a la ardua misión que un día se impuso: lograr para el país la paz negociada —y proyectada hacia la justicia social—, como única forma de resolución del conflicto social-armado que nuestra nación ha vivido durante los últimos 75 años. En él y en su ardua travesía se cumple el decir del poema de Brecht: “Hay seres que luchan toda la vida, esos son los imprescindibles”.

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Más adelante señala Rivera: “Formemos una cadena de afectos alrededor de Raulito. Convoquemos las potencias del alma colombiana y las de nuestros antepasados, los Pijaos, para que se consolide la fuerza psicosomática capaz de alentar el organismo de este gladiador de las ideas progresistas; y para que podamos verlo en las próximas movilizaciones y marchas sudando la gota y enarbolando sus banderas, que son también las nuestras”.

Luego señala: “Me permito invocar para él la protección y la compañía de los hados benignos de la patria. Es un gran tolimense; y a pesar de que su edad ha alcanzado los umbrales de la senectud, ha conservado intacta su capacidad de participar en las luchas de nuestro pueblo”. 

Desde esta tribuna del pensamiento libre, deseamos una pronta recuperación del “Camarada Rojitas”, para verlo de nuevo en las calles, pese a su edad, luchando por los necesitados de nuestro pueblo.