La natural alarma que ha causado el traslado de más de 350 archivos con la información de funcionarios y empleados de la Universidad del Tolima (UT), en forma clandestina, ha puesto a los diferentes estamentos del principal centro de estudios del departamento en alerta máxima.

En este sentido, la Asociación Sindical de Docentes de la UT que preside Félix Salgado, después de reunir información y documentos, solicitará a la Fiscalía General de la Nación, indicar una investigación sobre este hecho irregular, cuando después de las 10 y 30 de la noche del viernes 10 de marzo, en forma clandestina en una camioneta blanca de la misma institución, se llevaron lo que sindicatos, profesores y empelados, consideran información privada (Ley 1581 de 2012-decreto 1377 de 2013) de la Oficina de Relaciones Laborales, según denuncian los afectados.

Igualmente, se solicitará a la Procuraduría, la Personería y los ministerios de Trabajo y Educación, iniciar investigaciones a los implicados, especialmente de la Oficina de Relaciones Laborales, la Rectoría, la Secretaría General, y las vicerrectorías Académica y Administrativa, desde donde, al parecer, se coordinó este operativo, según se informó por parte estudiantes, trabajadores y profesores.

Estos hechos suceden en el momento que se adelanta el estudio para la restructuración de la UT, y se piensa  que se llevaron del Campus las hojas de vida para posible vigilancia y manipulación de las capetas, en un acto de vulgar espionaje a estudiantes, profesores, empleados y trabajadores. Una cosa de estas nunca se había registrado en la historia del Alma Mater.     

Agregan los quejosos que esta acción se realizó "Sin que mediará para ello orden judicial o de autoridad competente que levantará la orden  de mantener bajo custodia dichos documento,  exponiendo a sus titulares al riesgo de pérdida, alteración o vulneración de su privacidad. 

Las hojas de vida estaban bajo el amparo y custodia de Yolanda Ospina, jefe de esa dependencia, pues aunque son documentos de funcionarios públicos, contienen  información de la vida privada de cada individuo y por tanto debe mediar autorización expresa de la persona para que se acceda a su hoja de vida; lo cual aquí no sucedió", dicen en un documento donde se denuncia este hecho.

Al parecer las hojas de vida fueron transportadas en cajas sin marca ni numerar, algunas en forma suelta y sin la presencia de ningún organismo de control que inspeccionara el furtivo traslado de los documentos públicos y privados de los funcionarios y empleados de la universidad. Estos documentos fueron llevados a la sede Los Ocobos de la UT, localizada en la carrera 5a. con calle 10 de Ibagué, y descargados en los pisos 2 y 3 de la edificación.

Sede Los Ocobos de la UT a donde fueron trasladadas más de 350 carpetas en forma sospechosa de hojas de vida de empleados, funcionarios y trabajadores.

Todo parece indicar que este tratamiento oscuro y poco transparente con las hojas de vida, forma parte de una estrategia para sacar al personal no afecto políticamente a la administración barretista del rector (e) Omar Mejía, y afianzar al directorio político que desde que asumió el cargo se está formando en la UT, con miras al apoyo a la campaña al Senado de Miguel Barreto, familiar del gobernador Óscar Barreto.

Hasta el momento las directivas universitarias oficialmente no se han referido a este secreto retiro de las hojas de vida de empleados y funcionarios de la universidad, y solo se comenta que obedeció a razones de seguridad ya, que supuestamente, los encapuchados las iban a incendiar y la otra a razones legales de la ley general de archivos que obliga a la digitación de todas las hojas de vida y documentos de los funcionarios públicos. Sea la una o la otra, al menos se habría podido hacer este traslado a la luz del día, y no a las escondidas como se hizo.

Parece que a la administración Barreto, le gusta los trasteos nocturnos.  

(Puede leer: Qué ha destrás de la avalanchea de renuncias en la UT)