Son casi tres años de educación virtual a los que se han visto sometidos estudiantes y profesores de La Sagrada Familia, esto, en parte, debido a la pandemia por Covid – 19, pero principalmente a causa de las demoras e incumplimientos del FFIE (Fondo de Financiamiento de la Infraestructura Educativa), entidad encargada de los proyectos de megacolegio para jornada única a nivel nacional.

Los incumplimientos, excusas y ‘la tiradera de pelota’ entre el FFIE, el Ministerio de Educación, el consorcio Desarrollo Escolar, la Secretaria de Educación de Ibagué y otras entidades, evadiendo culpas, cansaron a la comunidad de La Sagrada Familia, quienes salieron a las calles a exigir la culminación de las obras de su colegio y pedir garantías para una educación presencial y digna.

Este lunes 23 de enero, estudiantes y padres de familia realizaron un plantón en la calle 71 con carrera Quinta, bloqueando el tráfico y elevando carteles que mostraban su inconformismo por la no entrega de su colegio en los tiempos estipulados.  Paralelamente, la rectora de La Sagrada Familia y otros directivos de la institución sostenían una reunión con representantes del Ministerio de Educación, FFIE, Secretaría de Educación de Ibagué, Contraloría General de la Nación y diferentes entidades.

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“En la reunión se llegó al acuerdo de que la planta física nueva la entregan el 28 de febrero y los mejoramientos de la infraestructura antigua los entregarán el 28 de marzo. Están cambiando la cubierta de los salones antiguos, están arreglando la humedad del auditorio, algo que se observó a última hora, por lo que también tienen que pasar por ciertas etapas para hacerlo y por ello la demora”, afirmó Gloria Susunaga, rectora de La Sagrada Familia.
 
Acerca del objetivo de iniciar desde ya clases presenciales y las opciones que se tienen hasta la entrega de la planta física de la institución, contó lo siguiente: “Mientras tanto tenemos tres sedes alternas que nos podrían permitir hacer presencialidad: la sede nueva del Juan Lozano, la sede vieja del Juan Lozano y el Celmira Huertas. Esas son las propuestas, pero vamos a hacer reuniones con los padres de familia para socializar con ellos las diferentes opciones, mientras podemos ubicarnos en las nuevas instalaciones del colegio”.

A lo largo de esta semana, directivos de la institución se reunirán con los padres de familia de los estudiantes de bachillerato para así llegar a un consenso sobre las opciones que se tienen antes de retomar a la nueva planta física de la institución. 

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Según lo contado por Susunaga, las aulas que tendrían a disposición serían las siguientes: 15 salones de la sede nueva del Juan Lozano Lozano, dirigidas a estudiantes de grados 10 y 11; 13 salones de la sede antigua del Juan Lozano Lozano y 12 salones de la institución Celmira Huertas. 

Finalmente, dijo que el retorno a clases en las nuevas aulas de La Sagrada Familia probablemente no se dé sino hasta marzo, cuando sean entregadas tanto las nuevas obras como la remodelación y mejoramiento de las antiguas.