A El Cronista.co fue allegada una denuncia que muestra una gran preocupación por la zona de expansión de Ibagué, la cual estaría en un total abandono por parte de los entes de control de la ciudad y en la que constructores irresponsables hacen “lo que se les viene en gana”, construyendo casas y apartamentos sin licencias de construcción o irrespetando las mismas después de obtenerlas.

“Los arquitectos en Ibagué estamos cansados de ver cómo se están atropellando las normas. Aquí, cada uno hace lo que quiere. El constructor grande sabe cómo violar las normas y no pasa nada. El constructor pequeño no saca licencia de construcción porque tiene un costo. Y no importaría tanto que lo hagan indebidamente, diría uno, pero si cumplieran con las normas urbanas y no lo hacen”, comenta el denunciante, quien pidió mantener su identidad en el anonimato.

A pesar de que son muchos los casos de este tipo, y que esta situación puede ser una de las causantes de la escasez de agua en Ibagué, la denuncia se concentra en la construcción de una casa ubicada en el kilómetro 1 vía Rovira, en el sector Villa Ceci, y que colinda con el restaurante La Hoguera. Allí, el constructor estaría edificando su casa prácticamente sobre la vía, irrespetando el antejardín, el andén, la zona de protección ambiental y hasta “se comió parte de la berma para poder meter su vehículo al inmueble”.

• Puede leer: Ibagué es la cuarta ciudad más maleducada de Colombia

El denunciante envió un derecho de petición a la Inspección Novena de Policía de Ibagué, solicitando confirmar la existencia de la Licencia de Construcción vigente de la construcción y que, en caso de existir la licencia, confirmar si las obras se están llevando a cabo conforme a dicha licencia o si está violando lo establecido en la normativa urbana de Ibagué.

A su vez, en el oficio se expone que desde 1993, está establecido el perfil vial para la vía que conduce a Rovira, el cual establece: 3,00 metros de antejardín; 2,00 metros de andén; 3,00 metros de zona verde, o de protección ambiental; 10,00 metros de calzada; otros 3,00 metros de zona verde, o de protección ambiental; otros 2,00 metros de andén y otros 3,00 metros de antejardín para un total de 26 metros lineales de perfil vial.

Sin embargo, comenta que los arquitectos que denuncian este tipo de atropellos a la norma se sienten abandonados en Ibagué, pues desde las inspecciones de policía se les trata con desaire y por lo general se hacen de oídos sordos ante las denuncias.

Por otro lado, oficinas como Control Urbano de la Alcaldía de Ibagué y las curadurías urbanas afirman que esos casos están fuera de su jurisdicción y que ellos se dedican a otras cosas.

• Lea también: Música para el desarrollo de Ibagué

“No hay quien diga, ve, hagamos seguimiento a ver si están cumpliendo lo que se aprobó. Eso no se hace en Ibagué. Debería haber una figura que como en Bogotá, que se llama Defensoría del Espacio Público, esa es una oficina con herramientas y profesionales que están mirando la ciudad o recibiendo quejas, aquí no. Lo único que vemos es que nos toca ir a la prensa a denunciar esto, si no, no nos paran bolas. Parece que todo estuviera hecho para que las cosas funcionaran mal”, agrega.

Este tipo de construcciones que incumplen la norma pueden ser sumamente perjudiciales para futuros proyectos urbanísticos de la ciudad, así lo explica el denunciante: “El señor borró antejardín, andén y dejó un pedacito de la otra zona. Entonces el día que en Ibagué quieran construir un andén no hay por donde porque ya no está esa zona. Y si este señor hace eso, el resto hace lo mismo, dicen: si el vecino ya se salió, ¿por qué yo no me voy a salir? Dentro de la vía hay una berma que recoge las agua lluvias, y el tipo ya la tapó para entrar el vehículo”.

“La Secretaría de Gobierno debería hacer algo con la Policía para hacer más eficientes estos procesos. Vemos que lo único efectivo es recurrir a la prensa o a un peso pesado como Martha Alfonso. Si nosotros queremos que la ciudad viva del turismo, tenemos que conservar nuestra ciudad. Ibagué es un muladar rodeado de un espectacular paisaje. Tenemos unas montañas maravillosas, pero aquí abajo todos hacen lo que quieren”, finaliza.