Centenares de cultivadores de arroz del Tolima iniciaron desde tempranas horas de este martes, sus concentraciones en el marco del Paro Nacional de Arroceros, como una forma de llamar la atención del Gobierno, con el fin de lograr un reajuste en el precio de la carga del cereal y obtener soluciones a otras problemáticas que vienen afectando a ese gremio.

Los arroceros se reúnen en sitios como La Tambora del Espinal, Puente sobre el río Saldaña en el municipio de que lleva el mismo nombre y en el municipio de Lérida en el norte del Tolima. Las autoridades desplegaron un amplio dispositivo en materia de seguridad para acompañar las movilizaciones y evitar algún bloqueo en las vías nacionales.

Según el dirigente del distrito de riego del río Recio, Germán Ortíz, el gobierno nacional impulsó la campaña "Colombia Siembra", que buscaba ampliar la frontera agrícola. Los arroceros acogieron esa invitación ahora que existe una producción histórica, pero no existe garantía del precio, donde los molineros impusieron un precio muy por debajo del mercado.

Según representantes de los cultivadores, el Gobierno Nacional incumplió a los productores con la expedición de resoluciones que permitirían avanzar y competir en la producción de arroz. Por esto, habrá paralización de operaciones en el Tolima, Huila, Meta y Casanare. (Ver: Arroceros del Tolima también entrarán en paro indefinido desde este martes)

“El Gobierno Santos ha incumplido con la expedición de resoluciones, lo que por supuesto ha generado malestar en los productores”, señaló Germán Ortíz, quien además es representante del Movimiento Nacional de Dignidad Arrocera ante el Consejo Nacional del Arroz. Este año los agricultores han tenido que manifestar en diferentes oportunidades su inconformismo, pues se han presentado incumplimientos graves, a todos los acuerdos. “El último de estos incumplimientos se evidenció este domingo 27 de agosto, donde no se cumplieron los acuerdos”, manifestó el dirigente.

“Hoy estamos vendiendo el arroz por cada carga a 20.000 pesos menos de lo que se vendía en abril y marzo de este mismo año”,  informa Ortíz. Esta situación tiene al gremio altamente preocupado y los arroceros de las regiones que entraron en cese de actividades esperan que en un futuro inmediato se empiecen a dar soluciones de tipo estructural para esta problemática general y que así no tengan que pasar por la misma situación cada año.