Combatir en dos guerras mundiales y alcanzar por sus acciones las más destacadas medallas de honor, recorrer el planeta siempre al filo de la aventura y el peligro, conocer las personalidades del momento en Europa y regresar a su patria jubilado por el gobierno francés, conforman el panorama de un tolimense digno de una novela. Se trata de Benjamín Echeverry Márquez  quien nació en el Líbano el 9 de febrero de 1.898 y murió en Ibagué el 20 de febrero de 1.981.

Partió de Colombia en 1.917 y a través de la condesa Noailles logra su ingreso a la Legión Francesa, para dos años después hallarse combatiendo en Marruecos y luego en la India. Su desempeño durante la permanencia en el lejano Oriente y las campañas de África y Siria, entre 1.914 y 1.918, le merecieron la Cruz de guerra con citación en la orden de la nación y otras condecoraciones de que ya era titular como La Gran Cruz de la orden del Dragón de Amám, la Cruz de guerra del teatro de operaciones exteriores y una de las más altas condecoraciones francesas, la Medalla Militar por acciones de guerra.

Cuando empieza la segunda guerra mundial es nombrado oficial fiscal de uno de los tribunales militares de París, encontrándose que, mientras los ejércitos victoriosos del tercer Reich ingresan por la puerta de Nevilly y pasan por al Arco del Triunfo en los Campos Elíseos, él sale por la puerta de Italia junto con 25 compañeros. En el curso de esa semana es hecho prisionero cuatro veces por las patrullas alemanas pero puede escapar igual número de veces.

Sin embargo regresaría al campo de concentración de Mathausen, en Austria, al finalizar 1.942, pero la resistencia europea lo contacta, le hace llegar pasaportes en regla, organiza su fuga gracias a la complicidad de algunos soldados y recibe órdenes de partir a Moscú. En 1.943 obra como espía de la resistencia a favor de los rusos, se le encomienda establecer contactos con espías alemanes y franceses para investigar los experimentos que los alemanes llevaban a cabo en Nogean, sobre el Marne, cerca de París. Al finalizar el año, los rusos sabían ya que los alemanes habían instalado en una pequeña localidad sobre el Báltico una planta de energía nuclear. Tras su regreso a la URSS le es reconocido el grado de capitán que tenía en el ejército francés y es ascendido a mayor de las fuerzas guerrilleras rusas, grado que a su vez le es concedido más tarde en Francia. En la primavera de 1.944 cuando formaba parte de un grupo de guerrilleros de una región de Ucrania, es asignado a una segunda misión en Francia cuyo objeto era mejorar los contactos entre las fuerzas de la resistencia europea y los guerrilleros franceses. En cumplimiento de su objetivco pasa por Alemania y presencia los intensos bombardeos de los aliados, cuyo devastador efecto minaba el ánimo de la resistencia alemana.

Este James Bond tolimense que creía en la Social Democracia, regresa a su patria cuando asesinan a Jorge Eliécer Gaitán, se emplea como profesor de francés, se vincula a las tertulias del Pequeño parnaso y el llamado de su tierra lo hace regresar al Tolima. Aquí se casa en 1.956 con Dora Díaz de Echeverry, fundadora del Liceo Val. Pertenecer a la Legión de Honor y luchar por la paz en el mundo, es la hazaña  de un coterráneo que dejó su testimonio en el libro Memorias de un combatiente. 

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