La mala funcionalidad de los semáforos en Ibagué ha generado un caos total en la movilidad de vehículos y de los peatones, debido a que estos a diario fallan por diversas causas, ocasionando percances en la movilidad, y abre la posibilidad para que haya ciudadanos lesionados y en algunas ocasiones hasta la muerte de algún peatón, pasajero o conductor.

Aunque la Secretaria de Tránsito no tiene unas estadísticas sobre personas lesionadas o muertas en accidentes por culpa de las fallas en los semáforos, se cree que puede ser un número alto.

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Carlos Enrique es un conductor de motocicleta y de profesión mensajero, señaló que “me he visto en varias ocasiones cogido por los carros, especialmente por las busetas, que a gran velocidad avanzan y al tener un semáforo fallando, se lanzan para continuar su recorrido, igualmente los taxistas que cuando ven un semáforo en pésimas condiciones, siguen su camino sin hacer el pare. Esto especialmente se registra en la carrera quinta con calle 60, donde se hacen unos trancones sin que se evidencia la presencia de un guarda de tránsito o un Policía”.

Darío, conductor de una buseta de servicio público desde hace 10 años, señaló que, “a los semáforos de la ciudad, incluidos los peatonales les hace falta un mantenimiento total, no es posible que este semáforo de la calle 10 con carrera quinta funcione por ratos al igual que el peatonal y no es que se trate de que en esta zona  no  haya luz, porque uno de ellos queda apagado y al rato prende, mientras que el peatonal sacó la mano”.

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“Quienes vamos por la calle 10 para bajar por la carrera quinta o a seguir de largo, nos toca guiarnos por los vehículos que hacen el pare frente a la Plaza de los Artesanos y así tomar hacia el centro o voltear para bajar por la carrera cuarta”.

Darío manifestó, que son muchas las intersecciones viales dónde no están funcionando y anotó que, en el sector de los Arrayanes, en el barrio Palermo, en la Avenida Ambalá frente a la Universidad de Ibagué, así mismo en el Jardín y en muchas ocasiones en vías como la Ferrocarril las fallas son constantes.

“Estas reparaciones se hacen a medias, porque cuando uno llega a cualquier punto de la ciudad, no es raro encontrar un semáforo apagado”, dijo este conductor de 37 años.

Desmintió al Secretario de Tránsito Alexis Mahecha quien afirmó que en la ciudad un promedio de dos semáforos se dañan y por eso de inmediato una cuadrilla atiende esta irregularidad.

Pero la totalidad de los conductores y peatones abordados, de manera unánime expresaron que los trancones no solo se hacen por culpa de los semáforos dañados sino de los reductores de velocidad y los estoperoles ubicados a un costado de las principales vías de Ibagué.

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Secretario de Tránsito y la caducidad de los semáforos

Por su parte el titular de Tránsito Municipal, José Alexis Mahecha, dijo que de las 92 intersecciones viales que hay en la ciudad sólo se conoce del daño de dos semáforos que son objeto de arreglo por parte de una cuadrilla.

El problema de estos es que tienen 20 años de trabajo y que a diario son reparados y que cuando un semáforo se arregla otro se daña. “Es un sistema arcaico que debe ser modificado cuántos antes, ya que en la mayoría de las ciudades del país cuentan con un sistema más avanzado”, dijo Mahecha.

Anunció que “el 7 de mayo se reunirá con la Findeter que entregara los estudios para la nueva semaforización, el costo del proyecto es de los 530 millones de pesos aproximadamente, por eso al conocerse que nos revelará ese estudio se determinará en qué tiempo, la ciudad tendrá nuevos semáforos”.