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Después de 238 años, tolimenses redescubren al Tinamú del Magdalena

Después de 238 años, tolimenses redescubren al Tinamú del Magdalena

 David Juez, Hernán Darío Arias, Ronald Mauricio Parra, Juan Manuel Linares, Jaime Bolaños, Cristian Mauricio Cardona y Felipe Vasco, integrantes del grupo de expedición Tinamú del Magdalena. Fotos: Hernán Arias.

Más de dos siglos pasaron desde el último registro oficial del Tinamú del Magdalena, un ave endémica del valle del Magdalena, en Colombia. Hace unos días, el ave fue redescubierta gracias a las observaciones desarrolladas por los avistadores, Cristian Mauricio Cardona y Felipe Vasco, y confirmadas por registros desarrollados durante una expedición liderada por biólogos pertenecientes a la Asociación Tolimense de Ornitología – ANTHOCEPHALA y observadores de aves de la región.

Estos reportes se constituyen en un sorprendente redescubrimiento relativo a una subespecie hasta ahora considerada extinta para el Tolima, que tan solo había sido documentada en la región durante la Expedición Botánica liderada por José Celestino Mutis, hace 238 años.

El Tinamú del Magdalena, es una subespecie de Crypturellus Erythropus, la cual hace parte de la familia “Tinamidae”, una de las familias de aves más antiguas del mundo. Diferentes autores han sugerido tratar al Tinamú del Magdalena como una especie distinta a Crypturellus Erythropus, pero se carece de evidencia que soporte esta distinción. 

La Asociación señala que a la fecha no se cuenta con información relevante de algunos aspectos biológicos de las subespecies de Crypturellus Erythropus, como vocalizaciones, genética y límites de distribución, lo que sería útil para esclarecer la taxonomía del Tinamú del Magdalena. Asimismo, afirman que este ejemplar es una de las subespecies menos conocidas dentro del complejo, ya que solo está representada por un individuo depositado en una colección zoológica, colectada hace más de 80 años (en 1943), además de algunos registros auditivos en Boyacá y algunas visuales sin confirmar en Santander.

El primer registro de la especie se realizó el 3 de julio del año en curso, por Cristian Mauricio Cardona y Felipe Vasco, quienes señalaron el avistamiento de un Tinamú encontrado sin vida, en el corregimiento de Méndez, municipio de Armero-Guayabal. “El registro correspondió a una fotografía del individuo encontrado muerto; imagen que fue compartida al grupo de Observadores de Aves de Caldas para su correspondiente identificación; posteriormente Juan Arbeláez informó por la red social de Observadores de Aves de Honda, para la confirmación de la especie Crypturellus Erythropus, el cual resultó presentar las características típicas de la subespecie”, escribieron en la página web de la Asociación.

El hallazgo del ejemplar permite tener noticia de la presencia y posible ubicación de la especie al norte del Tolima. Es así que investigadores del Tolima tomaron la iniciativa de planear una expedición para la búsqueda del Tinamú, logrando confirmar la presencia de la especie en Honda, mediante el reconocimiento auditivo (vocalización) y la toma de evidencia física, consistente en fotografías y grabaciones de sonidos de la especie.

El bosque seco tropical, es uno de los ecosistemas más perturbados y amenazados en Colombia; por ello es importante anotar, de manera preliminar, que la especie solo fue registrada al interior de fragmentos extensos de bosque en buen estado de conservación, lo que hace altamente probable que la especie requiera la integridad de este hábitat para su subsistencia. 

Este hallazgo se convierte en una razón adicional para llamar la atención sobre la urgente necesidad de conservar y recuperar estos pocos relictos de bosque seco tropical que aún persisten en el Tolima y el valle del Magdalena. 

Finalmente, afirman que además de la importancia biológica de la especie, el hallazgo de esta ave en la zona se convierte en una oportunidad para el desarrollo de actividades de turismo de observación ornitológica que aporten a su conservación y que puede traer beneficios económicos a las comunidades locales y a los operadores de turismo en este creciente reglón de la economía.


Información: Anthocephala - Asociación Tolimense de Ornitología

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