Las vacaciones en familia suelen ser muy divertidas, aunque también es cierto que resultan igual de trabajosas. Por esta razón, son muchas las parejas que sueñan con realizar un viaje sin la presencia de los niños para pasar unos días de completa tranquilidad. Sin embargo, algunos padres deciden no hacerlo, ya que los detiene el sentimiento de culpa que experimentan por dejar a los hijos en casa. Es por eso que en este artículo presentamos algunos consejos para viajar sin experimentar esta sensación de estar cometiendo un error.

Pensar que será un beneficio para toda la familia

Las vacaciones sin los niños son una gran oportunidad para reencontrarse con la pareja. Es necesario recordar de vez en cuando que además de la gran familia, existe una relación que necesita ser enriquecida constantemente y que debe encontrar sus momentos de intimidad y romanticismo sin interrupciones. Existen infinidad de paquetes de viaje preparados para diferentes tipos de parejas que ofrecen, desde lujosos hoteles en melgar o Bogotá hasta posadas románticas más sencillas y económicas. Generar este tipo de escapadas no es sólo beneficioso para la pareja sino también para el resto de la familia, ya que se presenta como una salida de la rutina para todos.

Decirle la verdad a los hijos

Una vez decididos a realizar el viaje, es necesario decirle la verdad a los niños e informarles que sus padres viajarán sin ellos. Lo mejor es hablarlo con varios días de anticipación para que vayan haciéndose la idea, y así evitar la angustia porque sus padres se van de un día para otro. Es de mucha ayuda enseñarles los lugares que visitarán, como también los hoteles y los paseos que harán. Mostrarle todo sobre su viaje les dará a los niños más tranquilidad y seguridad.

Contarles a los niños quién los cuidará

Otro punto importante para dejar a los niños tranquilos, es contarles con quién se van a quedar y quién los cuidará durante los días en que sus padres estén de viaje. Lo ideal en estos casos es que los pequeños se queden en su propia casa para que no extrañen sus cosas ni deban hacer un cambio tan brusco. Sería bueno que alguien se mude al hogar para cuidarlos, y en el mejor de los casos que sea una abuela, una tía o una amiga de la familia con quien se sientan contenidos y en confianza. Luego de decidir quién se encargará de esa tarea, sería bueno detallarle por escrito la información sobre la rutina de los niños, sus comidas preferidas y aquello que les gusta hacer, entre otras cosas.

Comunicarse con los pequeños diariamente

Finalmente, una vez en el lugar de destino, es muy importante que los niños se mantengan comunicados con sus padres. Lo mejor es llamarlos en momentos en los que estén entretenidos y evitar la comunicación de noche cuando se encuentran cansados o antes de dormir, ya que podría generarles mucha nostalgia. Mandar de vez en cuando fotos y videos del viaje, es una linda manera de estar en contacto y que ellos vean dónde y cómo se encuentran sus padres. 

Todos estos consejos servirán para realizar un viaje con tranquilidad y sin culpas, sabiendo que sus niños están en buenas manos y que ellos también estarán felices de que sus padres se disfruten mutuamente.