Las obras del puente elevado de la carrera Quinta con calle 60 provocarían un arboricidio sin precedentes en Ibagué. Así lo reveló el reconocido abogado ambientalista Juan Felipe Rodríguez. 

De acuerdo con el plan de aprovechamiento forestal que presentó el contratista, en total 195 árboles deberán ser talados en el área de influencia del proyecto, que comprende un polígono desde la calle 59 hasta la 64, entre las carreras Cuarta y Sexta.

"El área de intervención del proyecto presenta una composición florística variada, encontrando 35 especies, distribuidas en once (21) familias, para un total de 192 individuos y 3 individuos muertos en pie para un total de 195 individuos", reza el documento. 

Para el abogado Rodríguez, se trata de un despropósito que supera por mucho el impacto ambiental y social que ocasionó la tala de los cinco samanes en el Parque Centenario, ocurrida en mayo del año 2022. 

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"Si uno ve el inventario hay especies de gran interés como ocobos o samanes, que van a ser taladas. Es un golpe ambiental que se le va a dar a la ciudad totalmente descabellado, inconcebible, torpe. Se había dicho que eran 60 los árboles solicitados, pero ahora vamos a llegar a 195 individuos arbóreos", explicó el abogado. 

Las obras del polémico puente presentan retrasos, entre otras cosas, por demoras en la licencia que debe otorgar la Corporación Autonóma Regional del Tolima (Cortolima), para talar los 195 árboles. La corporación solicitó desde hace un mes la información detallada que explique o justifique la tala de esta gran cantidad de árboles. 

En su momento el alcalde de Ibagué, Andrés Hurtado, dijo ante medios de comunicación que el proyecto tenía previsto talar 60 árboles, pero que, estaban tratando de reducir la cifra a 16 o 23. Sin embargo, el plan de aprovechamiento forestal, presentado por el Consorcio Puente Carrera Quinta, establece 195. 

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El plan de aprovechamiento ambiental también establece la estrategia de compensación para sustituir los casi 200 árboles que se deben talar en el sector de la calle 60. Se trata de un predio en la zona de La Samaria, propiedad de la Alcaldía de Ibagué, donde serían plantados 1.950 árboles como compensación al impacto que genera el proyecto.