El presidente Gustavo Petro lamentó la muerte de 1.300 niños y niñas en Palestina durante la guerra que ese país libra desde hace una semana con su vecino Israel, y de paso cuestionó “la indiferencia” del mundo frente a esos hechos.

A través de su cuenta en la red social X (antes Twitter), el mandatario aseguró que “la indiferencia es lo que permite el aplauso a quienes ordenaron la muerte de nuestros 6.402 jóvenes inocentes bajo armas del Estado y a quienes han asesinado 1.030 niños en Palestina bombardeados”.

El jefe de Estado sostuvo que eso ha sido “la barbarie”, pues agregó que cada 15 minutos asesinan un niño en la tierra donde surgió una religión basada en el amor”, y dijo que “en Colombia mataron 350 niños bombardeados en este siglo y asesinaron 6.402 jóvenes sin armas en apenas unos años”.

Con esas palabras, el presidente colombiano se refirió a la cifra –un niño asesinado cada 15 minutos- que divulgó una publicación del Diario ECSaharaui, considerado uno de los medios líderes en información en español sobre el Sáhara Occidental que, a su vez, cita como fuente a la ONU.

Criticó también el mandatario a quienes “no defienden los niños en peligro sino el Herodes desencadenado”, y lo mismo a “muchos de los que hoy se consideran miembros de esa religión del amor”.

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Crítica

Así mismo, calificó de “ignorantes” a quienes lo han criticado de ser, supuestamente, “antisemita” y de apoyar a Hamás.

“No puedo defender una organización que sostiene la fusión entre Religión y Estado porque eso lo combatimos en nuestro propio país, y porque la visión de los que se creen pueblo elegido y raza superior lleva a la masacre de los demás pueblos”, afirmó el presidente en la red social.

Y aseguró que ni él ni sus padres y abuelos biológicos o ideológicos estuvieron con Hitler “como sí lo hizo la oligarquía y la prensa que me ataca”.

“Están resucitando a Hitler en los tiempos de la crisis climática y vuelve idéntico con sus campos de concentración y la destrucción completa de los pueblos. Hitler renace como práctica del poder político y económico sobre la división misma de la humanidad, sobre sus debilidades y sus miedos. El miedo al diferente es el padre de Hitler”, explicó.

El presidente Petro dijo que ese miedo a la diferencia es lo que hace que el poder político de Europa aplauda que expulsen a los palestinos hacia el sur, y cuestionó que “(Europa) se opondría con armas en los dientes si la expulsión fuera hacia el norte”.

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Entre la esperanza y la barbarie

Con todo, consideró que “aún la democracia tiene su oportunidad” que se aferra a la paz y a la vida de la humanidad y del planeta. “Esa vida integral de humanos y naturaleza que no se puede defender sino a través de la unidad de las diferencias. La reivindicación de la diferencia mata a Hitler”, añadió.

Según el mandatario colombiano, la democracia mundial es la voz poderosa del sur haciéndose escuchar. “Los pueblos condenados de la tierra están al sur y deben hoy gritar porque en la tormenta desatada por una atmósfera dañada por los gases que provienen del consumo enorme del norte y su riqueza, pueden perecer”.

El presidente concluyó que el consumo de la riqueza de hoy “se basa en la muerte de los demás, y crece solo si hace crecer la indiferencia y logra acabar la democracia”. Por lo mismo, concluyó: “Hoy Colombia y el mundo eligen entre la esperanza y la barbarie”.