La madre de Juan Camilo González dijo en días pasados que el mejor homenaje que se le podría rendir a su hijo consistía en que las autoridades tomarán medidas frente al control de acceso al lugar. La intención fue aplaudida, pues lo que propone Ingrid Oñate es que a otros caminantes no les ocurra lo que pasó con su hijo.

Proponía Ingrid que “El sector la ruta por Palomar, sector la punta, laguna Bombona,  finca Vancouver, termales del cañón hasta Arenales, sea intervenida y señalizada de manera inmediata”.

Agregaba que Parques Nacionales debe ejercer verdadero control sobre el ingreso de turistas pues no se tienen registros de la cantidad de personas que entran al nevado, no se socializan los riesgos que pueden tener y que tienen los ecosistemas cuando ingresan los turistas. “Hay un turismo ilegal porque según Parques Nacionales la ruta no se encuentra habilitada para turismo, pero la página oficial de la Gobernación la promociona. La alcaldía (Anzoátegui) no ejerce ningún tipo de control a pesar de que día a día son más los visitantes a este parque”, escribió Ingrid.

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A reglón seguido recomendaba la madre de Juan Camilo que “La única forma de ejercer control sobre esta zona es legalizando su paso, lo que obligaría a las autoridades a señalizar y a limitar la cantidad de personas que entran al parque y advertirles sobre los riesgos que pueden tener, y los daños que pueden causar a los ecosistemas”, concluyó Ingrid.

Pues bien, el alcalde de Anzoátegui, Carlos Hugo Salinas atendió ese llamado  y de inmediato generó una serie de medidas tendientes a proteger no solo la vida de los visitantes que por el sector del municipio ingresan al parte sino a proteger el ecosistema.

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Una de las medidas especiales es la exigencia de guías, en este sentido la administración municipal conjuntamente con Comparques iniciarán un proceso de capacitación a personas de la región para que presten ese servicio.

Las medidas contemplarían sanciones a las personas que ingresen al parque y hagan caso omiso de las restricciones.