En los últimos días se ha evidenciado un aumento considerable de los contagios por covid-19 en Ibagué. Concretamente, en lo corrido de esta semana, la ciudad ha reportado 1.129 casos nuevos.

De acuerdo con Johana Aranda, secretaria de Salud, el aumento se debe a las movilizaciones sociales que iniciaron el 28 de abril, en el marco del paro nacional. 

"Con el equipo epidemiológico teníamos claro que productos de las aglomeraciones, de las marchas, los casos iban a aumentar (...) Hemos venido en un alza considerable de casos, pero también de fallecidos, que hoy en día son personas entre 40 y 60 años", acotó Aranda.

Según la funcionaria, es evidente que los ciudadanos se han relajado con las medidas de autocuidado, y que, la vacuna contra el covid es efectiva, pues ahora los mayores de 60 años que fallecen, es porque "le han dicho no a la vacuna".

• (Puede leer: “Las personas le han perdido el respeto y el miedo al Covid-19”)

"Vamos a intensificar operativos en los diferentes sectores económicos: centros comerciales, almacenes de cadena, supermercados, y también vamos a iniciar un trabajo articulado en plazas de mercado", dijo. 

Actualmente Ibagué registra una ocupación del 95% en las Unidades de Cuidados Intensivos. Por su parte, las áreas de urgencia de los centros asistenciales se encuentran colapsadas. "Esperamos que este tercer pico de la pandemia no sea prolongado y nos permita bajar la ocupación de camas UCI", señaló la secretaria de Salud.

En ese sentido, también se pronunció el gobernador del Tolima, Ricardo Orozco. "Esto lo advertimos hace un mes cuando arrancaron las manifestaciones, sabíamos que eso iba a pasar, no solo con las aglomeraciones y tumultos del Tolima, sino de todo el país", apuntó. 

Sin embargo, al igual que la secretaria de Salud, el mandatario seccional tampoco enseñó pruebas que validen que realmente los casos aumentaron estrictamente por las aglomeraciones del paro nacional. 

• (Lea también: Llegan nuevas camas UCI para Ibagué, Líbano y Purificación)

Además, se refirió a posibles medidas restrictivas que, desde el sector de la salud, se pide que se implementen de nuevo. "¿Ya para qué cerramos cuando la ocupación de UCI está al máximo? Haríamos un doble daño: primero, lastimar mucho más la economía, y segundo, las UCI van a seguir llenas. Ya la capacidad de medicamentos ni personal existe; puedo tener 20 o 30 camas más, pero no tengo personal", arguyó Orozco.