¿Es posible tener buena relación con los adolescentes?, y cuando estalla el conflicto ¿hay que correr al psicólogo? Estas son unas de las muchas preguntas a las que los padres se enfrentan a diario sin encontrar una salida y que como consecuencia nos ha dejado una sociedad llena de familias disueltas, relaciones tóxicas y en el peor de los casos, suicidios.

Existe un camino y es hora de tomarlo. Esta maravillosa experiencia les ayudará a abrir esa puerta y les facilitará un canal de comunicación en casa con sus hijos. Con la grata experiencia de haber educado a una mujer y a un hombre con diez años de diferencia entre ellos, y en condición de padre, Mauricio Navas Talero, escritor y guionista trae la experiencia-conferencia, no solo para sensibilizar, sino también para abrir una puerta, un camino que permita y facilite ese puente de comunicación entre padres e hijos y de paso ayudar a las familias a que el diálogo con sus hijos no solo mejora la relación, sino que sea efectivo y acertado.

El encuentro sensibilizará e informará a los asistentes a detectar, reconocer y transformar los modelos de comunicación inconscientes que se generan con los hijos y que, tradicionalmente, se traducen en conflicto y distanciamientos dolorosos, a veces con consecuencias indeseables en la familia.

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Comunicación contaminada y rota

La comunicación, el camino más viable para concertar, sensibilizar, contar, expresar ideas y emociones. Una palabra que parece básica pero que tiene un enorme significado y cobra tanta vigencia ahora que el mundo convulsionado por la tecnología y las redes sociales, nos bombardea a diario con tantas noticias, que parece estar tristemente abrumado con todo lo que consume en esa desenfrenada autopista de la información

Ocurre lo mismo entre familias, padres e hijos, hermanos-sociedad. El mundo va a tal velocidad que la comunicación que se establece entre las nuevas generaciones y sus progenitores parece estar no solo contaminada sino rota.

“Soy sensible al gran reto que significa comunicarse con los hijos. Se dice que la dificultad aparece en la adolescencia y creo que se debe extender a toda la existencia. Tener buena comunicación con un niño de 3 años es tanto o más crucial que con la joven de 14”, dice Mauricio Navas Talero.

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Un nudo ciego

Parecería sencillo entablar conversación con esos seres que son resultado de nuestra voluntad y, además, poseedores de una carga genética que se supone afín, pero no es así, precisamente por las mismas razones, conversar con los herederos de nuestra genética y nuestra historia tiende a volverse un nudo ciego que se agudiza con aquello que llamamos la adolescencia.

Esta inmersión en el reto de comunicación con los seres que más amamos está basada en 30 años de estudio del fenómeno de comunicación que tiende a configurarse entre padres e hijos.

Temas como: El diálogo durante la infancia, qué significa escuchar, educar y conversar, las drogas, el sexo, el rendimiento escolar, las relaciones familiares, etc. Cómo abordar estos temas que tienden a volverse “bombas” en la vida hogareña por cuenta de que se ha llegado a la adolescencia. Por eso resulta clave visitar la  página www.mauricionavastalero.com.